Encuesta final de Tormenta de Espadas, en la que votamos por el mejor capítulo del tercer libro de Canción de Hielo y Fuego.
Tras la victoria de sam v de Tormenta de Espadas, llegamos así a la ronda final de esta nueva etapa de El Campeón del Torneo. Como todos sabéis, esto significa que ahora toca votar por el mejor capítulo del tercer libro de Canción de Hielo y Fuego.
Recordad también que podéis votar por el prólogo y el epílogo de Tormenta de Espadas, protagonizados por Chett, el hermano díscolo de la Guardia de la Noche, y Merrett Frey, quizá el hombre de Los Gemelos con el que más fácil nos resulta empatizar. Lo cierto es que son dos grandes capítulos, cargados de un terror apenas visible, una amenaza velada que si bien comparte una naturaleza completamente diferente no deja de poseer un punto en común: la vuelta a la vida de los muertos.
Hace algunos meses, al presentar todos aquellos rasgos que podrían convertir a Bran en Azor Ahai, identificamos una costumbre de Martin por abrir y cerrar sus libros con una temática similar. Así, el primer capítulo y el último encapsulan la acción de la novela, consiguiendo trazar un recorrido que queda claramente delimitado por dos pequeñas narraciones que comparten muchos puntos en común, incluso cuando en ocasiones se trate de oposiciones claramente buscadas y potenciadas. Tormenta de Espadas, de hecho, es uno de los mejores ejemplos de esto último que venimos diciendo.
Para empezar, este juego de espejos surge desde la propia elección de los puntos de vista. Tanto Chett como Merrett son dos seres grotescos y ridículos, quienes si bien no son abiertamente pusilánimes, simplemente se mueven para salvar su pellejo o para intentar no dejar patente que son dos fracasos andantes, como es el caso. Ambos se han visto desplazados por otros hermanos, metáforicos en la Guardia y solo de padre en Los Gemelos, y poco a poco su posición se ha ido convirtiendo en una losa cada vez más pesada y sin ninguna perspectiva de mejora; antes bien todo lo contrario. Los dos, que hasta comparten cierto parecido fonético en sus respectivos nombres, forman parte de dos grupos humanos en los que son el último mono y a los cuales, sin embargo, están prácticamente ligados de por vida sin poder cambiar su suerte.
No obstante, cada uno se encuentra en una parte del mundo y sus intenciones son en cierto modo opuestas. Chett hace bulto en el «lado de los buenos», pero a pesar de ello no deja de conspirar para acabar con personajes de la talla de Mormont o el propio Sam y conseguir desertar de la Guardia de la Noche. Merrett es uno de los miembros menos agraciados de la familia más odiada de todo Poniente, los Frey, engrosando así un «bando de los malos» en el que él no tiene en absoluto poder alguno de decisión, voz para opinar o autonomía suficiente como para desmarcarse de lo que se decide en torno a su linaje. Y si bien piensa en fugarse con la bolsa de monedas que debe pagar el rescate de Petyr Espinilla, lo cierto es que Merrett acaba cumpliendo su deber al presentarse ante la Hermandad sin Estandartes.
Sin embargo, Martin consigue dar un nuevo giro. Es de hecho el cuervo y no el Frey con el que resulta imposible empatizar, a pesar del odio visceral que el escritor despierta en el lector hacia los Frey desde los fatídicos acontecimientos vividos en Los Gemelos durante la Boda Roja. Chett es un personaje odioso, cuyo destino parece merecido. Merrett, a pesar de su poca valía, aparece como un pobre desgraciado que en cierto modo no se merece lo que le acaba sucediendo. Y si bien los muertos de Más Allá del Muro, el enemigo verdadero y último de la Guardia de la Noche, son los que llegan, por paradójico que resulte, para salvar el día de la expedición de Mormont, la muerta de las Tierras de los Ríos, ese espectro de fuego reanimado que se hace llamar Lady Corazón de Piedra, pone fin a la vida del desdichado Frey anunciando que la venganza que va a caer sobre la prole de Walder Frey, aunque merecida, no va a resultar fácil de leer. La impresión de enfrentar ambos pasajes, desde nuestro punto de vista, es situar la ansiada venganza sobre la familia más odiada de Poniente en un punto en el que incluso al lector más afín a los Stark se le removerá el estómago. Descarnada y cruel, parece ser que la justicia poética brillará por su ausencia en la destrucción de la Casa Frey, del mismo modo que la vena justiciera que encarnaba Beric Dondarrion deja de palpitar en cuanto muere definitivamente el Señor del Relámpago.
Y este paralelismo entre los muertos que vuelven a la vida, evidentemente, es la otra gran oposición que encontramos en el binomio formado por el prólogo y el epílogo de Tormenta de Espadas. La magia de hielo y la de fuego limitan así la narración del libro más impactante de la saga, de una obra que se desborda sobre sí misma y en la que los acontecimientos que se suceden, que drásticamente siegan de raíz diversas posibilidades o finiquitan brutalmente otras expectativas, hacen honor al nombre escogido por su escritor para titular la novela. Frente a los zombies que reaniman los Otros nos encontramos con una mujer que lo ha perdido todo, que no sabemos cómo ha vuelto a la vida y cuyo regreso, sin embargo, trastocará radicalmente los principios de la Hermandad sin Estandartes. Pero si bien la carne muerta parece compartir la necromancia, lo cierto es que hay una diferencia fundamental entre unos zombies y otros: la autonomía de los reanimados por el fuego. Así, mientras que Más Allá del Muro los Otros esclavizan difuntos y los utilizan en su escatológica batalla frente a los vivos de sangre caliente, en las Tierras de los Ríos son precisamente aquellos vivos que todavía conservan el calor en sus cuerpos los que inclinan su rodilla ante la propia muerte. Sin saber todavía el alcance del movimiento de Martin, lo cierto es que desde nuestra perspectiva es como si el escritor nos quisiese llevar a una situación carnavalesca, ante un mundo al revés.
No obstante, Tormenta de Espadas son muchos más capítulos que su prólogo y su epílogo, y de hecho imaginamos que la elección va a ser complicada. En cualquier caso, para facilitar la elección, os dejamos a continuación un resumen de cada uno de los capítulos más votados y un enlace a los análisis que hemos preparado sobre ellos. Que gane el mejor.
- prólogo: Chett está convenciendo a otros hermanos de la Guardia de la Noche para desertar. Su vida se ha vuelto más complicada desde la llegada de Samwell Tarly y Jon Nieve a la hermandad, quienes le apartaron de su servicio como mayordomo del maestre Aemon. Todo está planeado y dicho plan consiste en acabar con Mormont. Esto es un imperativo para que el mando de la Guardia pase a manos de dos hombres que no realizarán ningún esfuerzo en buscarlos. Se trata de Thoren Smallwood, quien quiere enfrentarse cuando antes al temible ejército de Mance Rayder, y de Ottyn Whiters, el cual por su parte mandaría a los cuervos de regreso a la seguridad del Muro. Ante las nuevas de los exploradores, Mormont decide que la Guardia de la Noche se enfrentará al Pueblo Libre en los próximos días. Esa misma noche, sin embargo, es la fecha precisa para llevar a cabo el plan pero pronto comienza a nevar, lo que impide a Chett y el resto de los sublevados cumplir con su plan. Una cosa es que los nuevos líderes de la Guardia no priorizaran su búsqueda y otra dejar en la nieve las huellas exactas de todos sus movimientos. Enfadado por su mala suerte, Chett decide matar a Sam. Cuando se acerca hasta el orondo joven, sin embargo, suena el cuerno de los guardias. Una vez. Sam se despierta y el cuerno vuelve a sonar. Chett trata de asustarle diciéndole que los salvajes vienen. Pero se equivoca, ya que el cuerno suena por tercera vez. Es entonces cuando el miedo se apodera de Chett, quien se mea encima.
- jaime v: Jaime y Brienne se recuperan en los baños de Harrenhal, reprochándose el uno al otro sus actitudes. En su defensa, Jaime cuenta que mató a Aerys y a sus piromantes porque estos tenían la intención de hacer volar Desembarco del Rey con fuego valyrio. Después de recuperarse, Jaime cena con Brienne y Roose Bolton. Durante el convite, Roose expone sus dudas al respecto de la marcha de la guerra, y Jaime le convence de que le deje partir a Desembarco, pues intercederá en su favor ante su padre. Brienne, sin embargo, es un trofeo de la Cabra.
- catelyn vii: los tambores resuenan durante el banquete, y la comida no es digna de un rey. Catelyn está sentada entre Roose Bolton y Ryman Frey, y si el primero, como siempre, se encuentra frío y comedido, Ser Ryman no hace más que sudar y evadir las preguntas de Catelyn y Robb Stark. La cena, no obstante, fluye tranquila con la excepción de los tambores. Pero, tras el encamamiento, todo cambia. Dacey Mormont es rechazada violentamente por Edwyn Frey, quien se dirige a la puerta principal del salón. Pero, en ese momento, todo se conecta en la mente de Catelyn: las ausencias de algunos Frey, los llantos de Roslin, la estridencia de la música y el hecho de que ahora estén sonando Las Lluvias de Castemere. Catelyn corre tras Edwyn y descubre que bajo sus ropajes lleva puesta la cota de malla y de repente comienza la masacre. Los hombres de Robb van cayendo y este es asaeteado antes de que Roose Bolton le ensarte su espada en el corazón mientras le envía saludos de parte de Jaime Lannister. Ni siquiera las amenazas de Catelyn sobre Cascabel, el Frey con retraso al que asesina, surten efecto; y Catelyn se vuelve loca y se desgarra la piel de la cara con las uñas. Acto seguido, mientras piensa en Ned, alguien le rebana el cuello. La Boda Roja ha concluido.
- arya xiii: la pareja llega hasta la Posada de la Encrucijada, el lugar donde Arya durmió cuando fue a Desembarco del Rey. Allí se encuentran con tres hombres de su hermano, Polliver, el Cosquillas y un joven escudero. La tensión se palpa en el ambiente, pero antes de que Arya pueda tachar un par de nombres de su lista, los soldados comparten información. Según cuentan, Gregor ha abandonado Harrenhal por orden de la reina tras habérsela arrebatado a Vargo Hoat, Tyrion se ha casado con Sansa, aunque el primero está preso y esta ha desparecido; Joffrey ha muerto, Arya se casará con Ramsay Bolton y el asedio de los Frey sobre Aguasdulces ha comenzado. Luego comienza la canción del acero. El Perro acaba con Polliver y Arya apuñala salvajemente al Cosquillas mientras formula las preguntas que este les hacía a sus prisioneros para dar con el paradero de Beric Dondarrion. Tras hacerse con Aguja, que estaba en manos de Polliver, le ofrece el donde la piedad al escudero, a quien había perforado las tripas. Sandor y Arya parten hacia Salinas en busca de un barco para llegar hasta el Valle, pero el Perro queda malherido en el combate y no puede continuar marchando. Arya decide abandonar al Perro sin darle el don de la piedad y parte sola hacia Salinas, vendiendo a Gallina, su caballo, al llegar al septo de la ciudad. Poco después acude al puerto, donde intenta comprar un pasaje para ir hasta Guardaoriente del Mar. Sin embargo, aunque no tiene las monedas suficientes para el trayecto, sí tiene la adecuada para escapar. Valar morghulis.
- tyrion xi: Jaime, que ha llegado a Desembarco, va a salvar a su hermano en medio de la noche. Allí hablan amistosamente hasta que el Matarreyes le confirma que Tysha no era una puta. Tyrion no se lo puede perdonar y le dice que sí mató a Joffrey y que Cersei se ha estado acostando con Lancel y con Osmund Kettleback. Tyrion prosigue solo por el cuarto nivel de las mazmorras de Maegor hasta encontrar a Varys. Marchan en la oscuridad hasta llegar a un mosaico con el dragón tricéfalo del que Shae habló a Tyrion una de las primeras veces que Varys la llevó a su dormitorio, cuando todavía estaba en la Torre de la Mano. Tyrion decide subir y saldar cuentas con su padre. Pero antes de verse cara a cara con él, Tyrion se encuentra a Shae desnuda en la cama de Tywin, con el collar de las manos de oro entrelazadas del cargo. Tyrion lo utiliza para asfixiarla. Luego coge la ballesta de su padre y va al excusado, donde Tywin se encuentra haciendo oro. Allí le pregunta por lo que hizo con Tysha, amenazándolo de que si vuelve a repetir la palabra puta, disparará. Tywin la repite al señalar que Tysha fue adonde van las putas, y una saeta se le clava en la ingle. Tywin le dice que no es hijo suyo, pero Tyrion le contesta que efectivamente lo es, puesto que es su viva imagen y le apremia a morirse rápido, pues un barco le está esperando. Tywin fallece demostrando que no cagaba oro.
- davos vi: Davos, según dijo Salla en el capítulo anterior, ha estado haciendo nuevas amistades. Estas comparten su lealtad a Stannis, y el rechazo de la influencia de los hombres de la Reina. Juntos consiguen embarcar a Edric en una de las naves de Saan, en una expedición que parte a Essos liderada por Ser Andrew Estermont. Davos luego va a ver a Stannis y Melisandre, y la nueva Mano del Rey reconoce que ha ayudado a escapar al chico, como lo llama Stannis. Melisandre y el rey están furiosos, sobre todo teniendo en cuenta que las sanguijuelas parecen funcionar, ya que Saan ha dado a conocer la noticia de que Joffrey ha muerto. Stannis se toma la acción de Davos como una traición, saca su espada y hace que Davos se arrodille para cortarle la cabeza. Sin embargo, Davos le pide a Stannis que antes de hacer justicia lea la carta de la Guardia de la Noche.
- sansa vii: Sansa esculpe un castillo de nieve en el jardín del Nido de Águilas. Meñique mejora algunos detalles del castillo y, tras decirle que es todavía más bella que Catelyn, la besa. Al momento llega Robert con un muñeco y destroza su castillo, lo que enfurece a Sansa, quien le desgarra su muñeco. Esto provoca que Roablito tenga un ataque. Sansa teme que su tía la reprenda por esto, pero en realidad su enfado está provocado por el beso de Petyr, ya que le recuerda a cómo Catelyn intentó seducir a Meñique y arrebatárselo. Lysa, desesperada, comienza a decir la verdad sobre todo, reconociendo finalmente que fue ella, siguiendo los planes de Meñique, quien administró las lágrimas de Lys a Jon Arryn y luego culpó a los Lannister. Meñique intenta tranquilizara para evitar que tire a Sansa por las Puertas de la Luna y la empuja al vacío después de decirle que a la única persona que amó en su vida fue a su hermana Catelyn. Sansa se queda en shock con todo lo sucedido, sobre todo cuando Meñique llama a los guardias y acusa a Marillion del asesinato.
- jon xii: Jon recuerda, mientras entrena, que siempre ha deseado Invernalia, y las noticias de las votaciones para conseguir un nuevo Lord Comandante no son halagüeñas, pues parece que Slynt es el favorito. Jon cruza el Muro para tratar de pensar un poco y ordenar sus ideas, y de pronto se encuentra con Fantasma. Luego acude a la sala donde están todos los hermanos votando, y se da cuenta de que su nombre ha salido en las votaciones. Yarwick pasa su apoyo a Jon Nieve y se retira de la siguiente votación, y luego el cuervo de Mormont parece elegirlo al posarse sobre él y piar su apellido. En la siguiente votación, Jon se convierte en el Lord Comandante 998, pensando que tiene que ir a hablar con Stannis.
- daenerys iii: Daenerys se entrevista de nuevo con los Bondadosos Amos y comparte con ellos su intención de comprarlos todos, incluidos los que todavía no han finalizado el entrenamiento. Los esclavistas se niegan pues saben que no tiene mercancías suficientes como para pagarlo, pero finalmente se cierra el trato incluyendo a Drogon. A su regreso a sus barcos, Daenerys habla con Missandei, la niña traductora, quien también ha entrado en el trato. Le pregunta sobre si es cierta esa obediencia ciega a su señor de los Inmaculados, ya que va a necesitarla. Ya en la noche, Quaithe de la Sombra vuelve a aparecer con sus comentarios enigmáticos. Al día siguiente, Daenerys se dirige a proceder al intercambio y ve un espectáculo dantesco mientras recorre las calles de Astapor. Cuando llega a la plaza del Castigo, le entrega al esclavista a Drogon y este le da a ella la fusta que indica la propiedad de los Inmaculados. Daenerys grita que ahora son suyos y le pertenecen, y lo hace en alto valyrio, lo que asusta al esclavista. A continuación ordena a Drogon que abrase al marchante de carne y a sus Inmaculados que se defiendan y acaben con todos los Bondadosos Amos y sus lacayos.
- bran ii: la marcha continua hasta que se topan con un forastero, quien podría ser un Liddle. Este indirectamente parece reconocer a Bran, y les auxilia con refugio y comida. Tras recibir la hospitalidad del desconocido, Bran y su comitivia continúan la marcha. El Príncipe de Invernalia les pide a sus amigos una historia, y los lacuestres le cuentan al joven la historia del caballero del árbol sonriente.
- sam v: Sam se entrevista con Stannis Baratheon y Melisandre de Asshai, quienes quieren saber qué sucedió exactamente con la obsidiana y el espectro. El rey le comenta que Rocadragón está llena de dicho vidrio, y que va a mandar que comience su explotación sistemática. Sam ve de cerca, además, a Dueña de Luz, la espada de Stannis, y se la describe al maestre Aemon, quien está interesado en verla. Aunque el acero es realmente bello, Aemon muestra sus dudas sobre el destino de Stannis al apreciar que la espada no emanaba ningún tipo de calor. Cuando finaliza la reunión, Sam se pone manos a la obra para elaborar su plan, que no es otro que conseguir que la Guardia de la Noche elija por fin a su nuevo Lord Comandante, cuya elección está acabando con la paciencia de Stannis. Tras sopesar sus posibilidades con el maestre Aemon, quien indirectamente le anima a hacer algo, Sam va a hablar con los dos candidatos más fuertes, Cotter Pyke y Denys Mallister, para que rechacen sus candidaturas y voten a favor de su candidato. Para ello, Sam se sirve de la enemistad de ambos al engañarlos, diciéndoles a cada uno de ellos que Stannis ha dicho que si no se encuentra esa misma noche un nuevo Lord Comandante, el propio rey impondría al rival del otro.
- epílogo: Merrett Frey está vagando por Piedrasviejas para pagar el rescate que la Hermandad sin Estandartes ha solicitado por la vida de Petyr Espinilla. Merrett, a quien la sucesión en Los Gemelos no le augura un futuro próspero, ha accedido a llevar a cabo el pago para intentar así congraciarse con el futuro heredero, ser Ryman Frey. Mientras realiza la marcha, Merrett piensa sobre su desdichada existencia y cómo todo se vino abajo cuando cayó preso de la Hermandad del Bosque Real en su juventud, episodio que le dejó graves secuelas en forma de dolores de cabeza que le incapacitaron la práctica de la caballería. Gracias a sus pensamientos internos sabemos que aunque el finado Lord Frey quería vengarse del Rey en el Norte, los ideólogos de la Boda Roja fueron Lord Bolton y Lothar Frey el Cojo. Cuando Merrett llega a la tumba del rey Tristifer se encuentra con que Petyr Espinilla ya ha sido ahorcado. La Hermandad sin Estandartes le acusa de la Boda Roja y Merrett demanda un testigo. Lady Corazón de Piedra está allí, y esta asiente cuando Lim le pregunta si dicho Frey participó en la masacre. Acto seguido, la Hermandad sin Estandartes cuelga también a Merrett, quien ni siquiera había sido capaz de cumplir su cometido durante el festín: emborrachar al Gran Jon Umber.
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