Análisis de la octava y última temporada de Juego de Tronos.
“Cuando era niño, se decía que un largo verano siempre significaba un largo invierno”. Si Tyrion lleva razón, nos espera un invierno larguísimo esperando Vientos de Invierno. Llega el momento de despedir definitivamente Game of Thrones echando la vista atrás y valorando la serie de HBO desde sus inicios. El Titán lanzó un llamamiento hace unos meses para reclutar a nuevos Escribas Leales, que se ofrecieron voluntarios para tan ardua tarea (especialmente aquellos que les tocó analizar según qué temporadas… nuestros pensamientos están con vosotros) y que, de forma periódica, han ido analizando una temporada de la serie. Hoy, después de siete entradas en las que nuestros Escribas han desgranado cada aspecto de la serie, nuestro verano llega a su fin y ponemos el broche final con el análisis de la octava y última temporada. A partir de ahora La Compañía vuelve a su ritmo de publicación habitual y esperamos seguir contando con vosotros, Leales.
En esta última semana os presentamos a otro nuevo Leal. Tras responder la llamada del Titán y visitar Braavos, @Antonerys no solo se quedó en la mejor de las compañías, sino que decidió enrolarse en la hasta ahora última misión del Escriba Leal. Su voz se oirá con nosotros por primera vez y el reto al que se enfrenta no es baladí: de su pluma se narrará el final de esta historia (o al menos el final que nos ha presentado HBO), las últimas batallas de hielo y fuego y la respuesta al gran misterio de la saga: ¿quién gana en un Juego de Tronos?
Juego de Tronos: Temporada 8
— Antonerys —
Una parte del camino es el final, como bien nos dice un pariente lejano de los Stark.
Antes de pasar al análisis más detallado vamos a dejar una cosa clara: ha sido una temporada muy floja. Llegaba en un momento complicado, ya que la anterior (ya muy alejada de los libros) se consideraba la peor de la serie. A esto hay que añadir que su estreno se retrasó (con el consiguiente aumento del hype, que ya sabemos en lo que suele acabar) y la confirmación de que tendría solo seis capítulos.
Empecemos por el opening, que tras siete temporadas con el mismo estilo, cambia. La cámara recorre el Muro roto, Invernalia y Desembarco del Rey. Según avancen los muertos iremos viendo como se mueven las casillas azules, y tras las batallas veremos las consecuencias en los distintos lugares. Un detalle que me encanta es ver el león de los Lannister al fin en la capital, algo que echaba en falta desde la muerte de Robert.
Vale, hablemos de la trama.
En vez de dividir la temporada en tramas, lo voy a hacer en dos bloques argumentales, porque en esta ocasión no hay varias historias que se entrelazan sino una única (obviando las escenas de Cersei y los Greyjoy en los primeros capítulos), lo que me parece un punto negativo para el guion. De forma que los primeros tres capítulos son del bloque argumental de Invernalia y los tres últimos del de Desembarco del Rey.
Y esta división la conocíamos antes incluso de ver la temporada. Cuando se confirmaron los directores de cada capítulo y vimos que Miguel Sapochnick, conocido por dirigir capítulos de batallas, estaba al mando de los capítulos 3 y 5, la estructura que se iba a seguir quedó clara. No sé cómo se podría haber evitado esto pero me parece otro punto negativo.
Y ahora vamos a la historia en sí:
Jon Nieve vuelve a Invernalia acompañado de Daenerys Targaryen y todo su ejército, dragones incluidos. Y claro, los norteños, tan suyos que son, ponen mala cara. Pero la cosa solo acaba de empezar porque Jon les va a decir que ha hincado la rodilla ante Daenerys y ha perdido su corona a cambio del apoyo de la Targaryen porque lo importante ahora mismo es el ejército de los muertos y necesitaban aliados.
Durante este primer bloque argumental vemos únicamente un par de escenas de Desembarco del Rey. Qyburn informa a Cersei de que los Caminantes Blancos han cruzado el Muro pero a esta solo le interesa que la Compañía Dorada está a punto de desembarcar.
Y entonces ocurre, el tema de los elefantes.
No soy experto en guion pero creo que sé lo suficiente de narrativa como para saber que aquí algo falla.
Efectivamente la Compañía Dorada es famosa por tener elefantes, y entiendo que era un detalle que la serie no quería omitir, pero si luego vas a justificar que son animales que no pueden cruzar el mar, no digas que lo van a hacer.
Era tan fácil como informar de que el DLC de los elefantes no iba incluido en la versión a domicilio, así de fácil. Un comentario de Cersei a Strickland echándole en cara no haberlos traído mejoraría mucho en este sentido. Otras opciones, aunque reconozco que quizás serían peores, podrían ser no mostrarlos o enseñar alguno dentro de Desembarco del Rey antes del ataque (o fuera, si fuera fácil introducirlo con ordenador) y dar a entender que murieron en el fuego. En fin, el meme ayudó a superarlo.
Pero nos estamos adelantando mucho, volvamos al presente. Euron quiere su recompensa por traer a la Compañía Dorada y tras un regateo al final lo consigue. Me gustaría destacar, aunque quizás es contenido de la temporada anterior, que la unión Cersei-Euron me parece muy interesante.
Antes de despedirnos del sur hasta que ocurra lo que todos los espectadores saben que va a ocurrir, vemos cómo a Bronn se le encomienda una tarea, matar a Tyrion y Jaime con la ballesta que acabó con la vida de su padre.
En Juego de Tronos había una leyenda según la cuál varios personajes habían terminado muriendo a manos de armas que ellos mismos habían utilizado, y durante unos días todos creímos que Tyrion iba a encontrar su final.
Volviendo al Norte, Davos, que sabe que el Norte nunca aceptará a Daenerys, plantea la opción conocida como el matrimonio Disney: que Jon y Daenerys gobiernen los Siete Reinos juntos.
Cuando esperábamos la temporada, esta opción parecía la más clara y aquí parece que se confirma. Recuerdo a mi yo de entonces quejándose de que nos iban a dar el final más soso. Ay, lo que daríamos ahora por ese final (risas enlatadas).
Después llega el momento deseado, Daenerys le ofrece a Jon montar el dragón que, sin saberlo él, lleva el nombre de su padre. Y tras un poquito de fanservice vemos que la llama del amor sigue encendida. Y los dragones, famosos por su inteligencia, ven cómo un miembro de su familia (porque un dragón sabe que solo los que tienen la sangre del dragón pueden montarlos) se morrea con su madre.
Estoy hablando poco o nada de los reencuentros, porque creo que tampoco hay mucho que decir. Por destacar, los de Arya con Jon y el Perro me parecen los mejores.
A lo largo de este inicio de temporada se repite un par de veces que Daenerys, que tiene que intentar ganar la confianza de los norteños, no es como su padre. Y al final tienen razón, es peor. Esto lo digo ahora y me lo quito ya, porque lo van a repetir mucho, como avisándonos de lo que se viene.
Sam le cuenta a Jon que ha estado leyendo libros y que es un defensor del R+L=J, dándonos uno de los momentos más esperados de la saga. Me gustó el detalle de que lo primero que piensa Jon no es en su familia, en sus derechos dinásticos, o en su relación con su tía, sino en su padre digo tío. Para Jon, enterarse de que Ned le engañó toda su vida es un choque muy fuerte, y esto me gustó. Punto positivo.
Lo que ocurren en Último Hogar nos muestra que los Caminantes Blancos ya vienen, y prometen (jé).
Y lo siguiente que ocurre es que Jaime llega a Invernalia a luchar por los vivos, y entonces se reencuentra con Bran y automáticamente todos conectamos con el primer episodio de la serie, esto me encantó.
El caso es que la llegada de Jaime es muy turbulenta. Daenerys no ha olvidado por qué le llaman Matarreyes y este desarrollo me parece genial. Finalmente Brienne intercede por él y le dan una oportunidad. Pero ha venido solo, y Daenerys le mete el broncazo a Tyrion porque tienen que discutir antes del capítulo 5.
Jaime y Bran mantienen una conversación muy interesante sobre lo que eran antes y ahora, Bran muestra que es muy sabio por perdonar a Jaime, y le explica que aquello le hizo evolucionar. “Yo aún sería Brandon Stark, ya no lo soy”, vaya.
Siguiendo con Jaime, volvemos a tener un momento interesante cuando Tyrion lo acusa de amar a Cersei aún sabiendo cómo era. Después se saluda con Brienne, adelantándonos que eso de “Lady” va a cambiar.
Por otro lado, Daenerys sigue el consejo de Jorah de hablar con Sansa, y utilizando la altura de Jon parece que conectan un poco, aunque rápidamente se les pasa y entonces llega Theon, que ha venido a defender Invernalia (porque antes había rescatado a su hermana y esta se había ido a recuperar las Islas del Hierro, ocurre tan rápido que por poco se me olvida comentarlo).
En Invernalia se siguen preparando, y Davos observa dos momentos que me gustaron mucho. Primero, la circunstancia de reclutar campesinos para luchar, es algo que da que pensar, y segundo la escena con la niña con psoriagrís que le recuerda a Shireen, que es un momento épico. Y entonces llegan Edd, Beric, Tormund y su gif. El detalle de que los Umber están en el bando del Rey de la Noche me gustó, me rememora tiempos del pasado en el que las guerras no eran entre buenos y malos y la gente tenía que posicionarse. Y por cierto, evidentemente apoyo el romance entre Brienne y Tormund.
Nuestros héroes están preparando la batalla y Bran les cuenta que el Rey de la Noche quiere matarlo por nosequé de la memoria, de todas formas da igual porque van a morir sin que sepamos muy bien qué querían. El detalle de que sea Theon y los Hijos del Hierro quienes defiendan a Bran cuando una vez le quitaron Invernalia me parece otro punto positivo. Un detalle de esta escena es que ver sobre el mapa los emblemas de los Targaryen y los Arryn me recuerda de nuevo a etapas en que las guerras seguían estrategias interesantes. Porque hace unos instantes Brienne ha dicho que el terreno es bueno para defenderse pero luego tirarán, porque no tiene otro nombre, la mitad de sus fuerzas contra la nada.
Luego de planear la batalla, Tyrion se queda hablando con Bran, lo que en este momento parece curioso pero que luego desearemos que no hubiera ocurrido. Más tarde, Missandei presenta otra cuestión interesante: Daenerys no deja de ser una reina extranjera con un ejército de inmigrantes que no son aceptados, y esto es así aunque decidió no atacar Desembarco directamente. Y bueno, Gusano Gris, que en esta temporada va a soltar cada perla, dice que cuando acabe la guerra no habrá lugar para ellos, porque lo de tener un ejército cuando acabas de conquistar un trono es puramente estético.
Y entonces, haciendo referencia a su nombre, aparece Fantasma de la nada. Este es uno de esos temas que más me quemaron cuando se estaba emitiendo la temporada: Fantasma es un lobo huargo, es un lobo huargo especial, es un lobo huargo especial que siempre ha acompañado a Jon, no como un perrito sino como un compañero. Y puedo entender que sea difícil mostrarlo en pantalla todo el rato, pero que después de la batalla nos lo muestren como un cachorro lloroso, QUE JON NO SE DESPIDA DE ÉL, y que luego resulte que era un truco de guion barato para que nos alegremos cuando al final acaben juntos, en una palabra, no.
En la charla entre Jon, Sam y Edd quiero marcar un par de cosas: no dejan de darnos a entender que Sam no sobrevivirá (ya hablaremos de esto) y además dejan claro que no quedan más hermanos de la Guardia de la Noche (jejé).
Y ahora preparaos porque llegamos a la mejor secuencia de la temporada.
Jaime y Tyrion hablan junto al fuego de cómo han cambiado las cosas, cuando se les unen Brienne y Podrick, y luego Davos y Tormund, y no puedo evitar recordar cuando Tyrion propuso jugar al “Yo nunca” en la primera temporada. La historia de Tormund me parece correcta, que se tire la leche por encima me parece raro.
Y hacemos un paréntesis para ver a Arya, que tras hablar con el Perro y Beric (hum), se va a darnos otro de los momentazos de la temporada. Arya es el único personaje “niño” que hemos visto crecer como tal y me parece fenomenal que decida probar las relaciones antes de una más que probable muerte. “We will join our houses” de Robert suena de fondo. La escena es magnífica.
De nuevo en la hoguera del campamento, Tyrion nos vuelve a evocar al pasado recordando viejos enfrentamientos y batallas, al igual que Jaime (haciendo un paréntesis, es que no me digáis que no es de lo mejor que se ha visto en la serie en las últimas dos temporadas, al menos). Davos tiene varios momentos en esta secuencia, no las pongo todas porque sería favoritismo. Después, llega el aclamado momento que da nombre al episodio, y Jaime nombra a Brienne caballero. Y es la primera vez en la temporada que se me pone la piel de gallina.
Todos se levantan, Jaime está nervioso y al final, Brienne emocionada.
Toda la actitud de Tormund me encanta porque lucha y reivindica lo justo, huyendo del feminismo rancio de esa forma que Juego de Tronos tan bien sabe.
“Alzaos, Brienne de Tarth, Caballero de los Siete Reinos”, como indicaba mucha gente, este acto pone punto y final al arco de redención de Jaime, y lo prepara para morir (ahora estoy muy emocionado y no voy a poner ningún comentario sarcástico).
Sam entrega Veneno de Corazón a Jorah y es poético. Es un éxtasis narrativo que el robo de la espada de la familia Tarly tenga un significado. “Para guardar el reino de los hombres”, el Viejo Oso sonríe.
De nuevo nos dan pistas de lo que sucede, o al menos debería suceder, cuando Sam dice que se verán cuando acabe.
Y entonces llega el momento mágico de la secuencia mágica, y Podrick canta Jenny of Oldstones, y bien saben los que me conocen que llevo obsesionado con esta canción desde entonces.
Y finalmente, Jon le revela a Dany (choca oírlo en la serie) quién es en verdad, y me parece que esta escena es correcta. Pero de repente, ¡llegan los muertos!
Llegados aquí quiero explicar una cosa, que me hizo no disfrutar del todo esta primera parte de la temporada. Como he explicado antes la estructura de la temporada era previsible, pero es que también era mala.
Los Caminantes Blancos protagonizaron la primera escena de la serie, tanto en los libros como en la serie, y han estado toda la historia, aunque secundarios en algunos puntos, presentes siempre.
Era casi poético que la trama principal de la serie (porque eso es) se viera opacada por las pugnas por el Trono y las preparaciones de conquista de continentes, y que estas fueran las que más gustaran. Yo soy de esos (que no somos pocos) que durante la serie, cuando aparecían los Caminantes Blancos, nos sacaba de la historia. En una serie sobre conflictos políticos medievales, los zombies de hielo no parecen encajar mucho. Y por todo esto la estructura del final de la serie debía cuidarse, porque teníamos que entender de golpe que los reinos son juegos de niños y que lo que importa es la lucha por la vida.
Y entonces llegan los guionistas de la serie (no sé si únicamente D&D o más gente, pero me circunscribiré a estos dos porque creo que son los que tienen mayor poder de decisión) y deciden poner la batalla final en mitad de la temporada. Con dos huevos de dragón.
Cualquier estudiante de primer año de los estudios de cine que sean sabe que no puedes poner el clímax ahí en medio. No puedes cerrar una trama que lleva desde el minuto uno así. Y por eso, cuando vi los dos primeros capítulos, no empaticé con los personajes porque no entendía que estaban ante la batalla definitiva. De alguna forma, daba por hecho que esto no se acababa aquí, que sería una especie de primer asalto y que el enfrentamiento final ocurriría más adelante. Y no fue hasta terminado el 8×02 que caí en que habían destrozado la temporada.
De nuevo, no somos pocos los que pensamos que en los libros este orden se invertirá: primero Daenerys, Jon, Gendry o quien sea ocupará el trono y luego llegará la guerra por la vida. O puede que, como leí decir a alguien, ambos conflictos ocurran a la vez y que los muertos lleguen justo cuando se esté decidiendo quién gobierna Poniente. En cualquier caso, lo que es imperdonable es que nos digan que la batalla es ya de ya y que la lucha por los vivos es lo más importante, para luego volver al juego de tronos. Es que es la leche, podría decir más cosas pero no más claras.
Volviendo a la historia, ha llegado la batalla, y sinceramente voy a pasar muy rápido por ella.
Una serie que ha tenido conflictos tan épicos como la Batalla del Aguasnegras o la de los Bastardos (ojo, esta ya sin los libros como base) no puede permitirse esta basura. Un capítulo de hora y algo exclusivamente de batalla sin sentido, sin estrategia y con personajes con plot armor (que era algo impensable en GOT hace años).
Empieza la batalla y aparece Melisandre, para mí no tan de la nada porque su vuelta era algo que podíamos esperar, y enciende los arakhs porque tenemos que ver con claridad cómo desperdician medio ejército. Vamos a ver, si llevamos mucho avisando de que no es un rival normal, y que la estrategia era resistir e intentar ir a por el Rey de la Noche, ¿por qué lanzas la caballería? Es algo básico que si quieres defender una fortaleza no debes mandar una línea de ataque. Pero claro, la escena tenía que quedar bonita y eso es más importante.
En fin, que el primer ataque no sirve para nada y los muertos avanzan. Un detalle que no me gustó es no ver algún Caminante Blanco luchando. Queda claro que son pocos y que únicamente comandan a los espectros, pero habría quedado guay ver a uno al estilo de Casa Austera interviniendo en algún momento, en alguna incursión o luchando contra Jorah y Daenerys.
Edd el Penas muere salvando a Sam, lo que me pareció muy bonito y un indicador más de que no sobreviviría a la batalla.
Los muertos siguen avanzando y se llevan a otro personaje por delante, a mi favorito de la serie: Lyanna Mormont. La pequeña Lady Oso da su vida por matar a un gigante zombie, la más pequeña matando al más grande. Siempre te recordaremos.
La batalla incluye un enfrentamiento con dragones entre otras escenas con ellos, pero me supieron tan a poco que hasta que no revisioné el capítulo no me acordaba de ellas.
Arya está dando vueltas por ahí y en una de estas Beric muere para salvarla (es muy curioso que prestemos tanta atención a un personaje, vemos cómo van hiriendo a Beric, porque sabemos que lo que haga influirá notablemente en la historia, muy interesante a nivel narrativo), y empezamos a ver por dónde van los tiros; aunque sinceramente, que un dios haya hecho lo imposible para que cumplieras un propósito y que ese sea salvar por los pelos a Arya (independientemente de la importancia que tenga esto) me pareció así, así. Entonces se encuentra con Melisandre que, haciendo referencia a un dialogo del que no se acuerda nadie, le da a entender que debe matar al Rey de la Noche, ella se motiva y para ello que va, esquivando obstáculos por el camino, o al menos eso pensamos porque no la vemos hasta que llega el momento final. Aunque eso sí, muy fan del “Not today”.
De repente descubrimos que el fuego de dragón no puede matar al Rey de la Noche y todos nos empezamos a poner nerviosos. Jon va tras él pero poder resucitar y añadir unidades a tu equipo es una habilidad muy útil en este juego, y no vemos ese duelo que tanto ansiábamos.
Entonces Jon se pone a corretear por Invernalia, y ve a Sam y Jaime que están a punto de quedarse sin comodines. Y es DURO Y PRECIOSO que prácticamente deja morir a Sam porque no puede pararse ahora mismo. Estaba todo hecho, Sam había llegado al final. Pero no. Había que salvarlo. En su momento pensé que era porque la Guardia de la Noche iba a necesitar un nuevo Lord Comandante, podéis reíros pero lo que pasó al final es incluso más inverosímil. También menciono a Jaime porque, tras cerrar su arco, debería morir aquí también, y el no hacerlo va a tener como consecuencia que luego no van a saber qué hacer con él y va a pasar lo que va pasar. Pero ya hablaremos del final al final.
Uno que sí termina su viaje aquí es Jorah, que a diferencia de los anteriores sí cierra perfectamente su desarrollo, y muere defendiendo a su reina, pero sin saber si finalmente conseguirá el trono. Magnífico.
En la cripta, los cuerpos de los reyes Stark oyen la llamada del Rey de la Noche y también se levantan. Habría dado lo que fuera por ver a Ned como zombie. Pero la secuencia nos deja algo bastante bueno, y es que cuando Sansa y Tyrion cruzan miraditas empieza a sonar algo…
Lo que resta de batalla va a estar acompañado del Night King Theme, una obra maestra de Ramin Djawadi, que en mi opinión está al nivel de Light of the Seven. Al poco tiempo se convirtió en la banda sonora que más veces he escuchado en toda mi vida. Ocho minutos de puro éxtasis. Ramin rey.
El Rey de la Noche ya ha llegado al Bosque de Dioses y Bran, que había usado sus poderes para a saber qué (el fin de semana que se emitió el capítulo se estrenó Endgame, quizás se fue a ver la última de los Vengadores), despide a Theon y se lanza a la muerte para ganar tiempo, y vemos otro ejemplo de personaje con desarrollo completo; a mí Theon me sobraba hace dos temporadas, pero mereció la pena al final, y se redimió de sus pecados.
Y cuando el Rey de la Noche está a punto de asesinar a Bran, Arya salta y le consigue engañar para matarlo con la daga que casi acaba con Bran en la primera temporada. Sobre el tema Arya se ha dicho mucho y yo solo voy a aportar dos cosas: primera, que D&D dijeron que este giro se les ocurrió hace unos tres años. Tres años. Martin no lleva más de dos décadas pensando su historia para que ahora metan algo porque “hace tres años se les ocurrió y les pareció bien”; y segundo, a mí no me parece del todo mal, pero deberían habernos enseñado a Arya llegando, hay quien dice que el que Jon crea que puede matar a Viserion gritando es porque en realidad este está vigilando el Bosque de Dioses y Jon lo distrae para que Arya pase, y por supuesto el resto de Caminantes no la ve y la dejan pegar ese brinco.
Además un detalle curioso que aportó el youtuber Kai47, experto en lore de Canción de Hielo y Fuego, es que Arya representa (al menos en los libros) a la misma muerte, y es extraño pensar que la muerte es quien mata a la muerte, y que por eso en los libros esto será diferente.
Y bueno, que no hayamos descubierto nada acerca de los Caminantes Blancos los convierte en el Macguffin más caro de la historia de la televisión, como oí decir a alguien.
Como anticipaba antes, el no acabar con Jaime cuando se debería hace que ahora sobre, y si bien soy fan de que al final consume su amor con Brienne, que luego vuelva con Cersei es un enorme puf, aunque me gusta el detalle de la incertidumbre de no saber si volvía para matarla y cumplir el valonqar o porque al final de todo, sigue amándola (lo cuál me parece muy bonito y por tanto ignoraremos que hace dos capítulos Cersei mandó a Bronn para matarle).
De lo de Bronn solo comentaré que me parece una broma interna muy graciosa considerar Altojardín como el doble de Aguasdulces. Además cuando Tyrion empieza a citar al Varys de la primera temporada y Bronn le manda callar es un símil perfecto de lo que es la serie ahora.
Pero antes de partir, Daenerys legitima a Gendry como hijo de Robert Baratheon para lograr el apoyo de Bastión de Tormentas y este corre a decírselo a Arya, pero ella no quiere ser su señora. Otra cosa que quiero señalar es que ahora resulta que Gendry se apellida Ríos, what the fuck. Su apellido debería ser Mares, que es como se apellidan los bastardos de las Tierras de la Corona. Tiene toda la pinta de que han cogido un apellido de bastardo famoso y se lo han puesto, si es así debemos agradecer que no sea Gendry Nieve.
Y mientras vemos cómo Daenerys observa cómo idolatran a Jon (y se acaba de acordar de que es de la familia), y cómo Bran asegura que ya no desea nada, Sansa nos deja con la miel en los labios de ver confirmado el SanSan (Sandor x Sansa).
Y por fin, marchan para conquistar el Trono de Hierro, no sin antes contarle Jon a su familia quién es. Una escena precioso, o eso suponemos porque lo cortaron. Y muy curioso ver a Arya –Tywin Lannister- Stark hablando de la familia. Y luego esta va con el Perro hacia el sur intentando rememorar buenos tiempos.
Nos llegan noticias de otros reinos, Yara ha conquistador las Islas del Hierro en nombre de Daenerys y el nuevo Príncipe de Dorne también apoya a la Targaryen. Luego, en la travesía, sufren el ataque de la Flota del Hierro y Rhaegal muere. No comentaré el agujerazo de guion porque ya es de risa. “Dany kinda forgot about the Iron Fleet” dice una de las D de D&D. Menos mal que habían hablado de ella en la escena anterior.
En fin, Tyrion protagoniza un gran plano secuencia y Euron captura a Missandei y cuando Daenerys y Tyrion intentan recuperarla, Cersei la mata. Supongo que a Euron no le extraña que Tyrion sepa lo de su hijo porque aún sigue impactado por haber viajado tan rápido desde Rocadragón.
Las muertes de Rhaegal y Missandei fueron muy criticadas pero, quitando cagadas de guion, me parecen muy juegodetronianas ambas muertes, y que la de Naath termine su vida entre cadenas es triste y poético. Y Daenerys, a la que habían convencido de sitiar Desembarco, pone mala cara.
Pasemos ahora a Varys, que en su misión de buscar al mejor Targaryen se encuentra con que Jon lo es, y la gente lo adora. Además empieza a cuestionar si Daenerys pudiera haber heredado algo de la locura de su padre, como empezamos a ver. Y Varys nos da a entender que va a matar a Daenerys, y de hecho eso parece que vemos. Y tras intentar convencer a Jon, en un inentendible paso en falso de la Araña, Daenerys le pilla y lo ejecuta. Y así es como muere uno de los personajes más interesantes de la saga, como un tonto. Gracias D&D.
Las relaciones de Daenerys con Jon y Tyrion se enfrían y esta decide liberar a los inocentes de Desembarco. Liberarlos de vivir esta vida tan dura, aunque Tyrion la medio convence para que detenga el ataque si la ciudad se rinde, ya que no seguirán a Cersei si ven que pierde.
A punto de empezar la batalla, a Jaime le pasan cosas y de repente lo prenden, luego protagoniza con Jaime una bonita escena pero en la que descubrimos que al Matarreyes nunca le importaron los inocentes. Solo mató al Rey Loco y evitó una masacre porque era un joven rebelde. Luego Tyrion libera a Jaime y le pide que huya con Cersei y provoque la rendición de la ciudad.
Volviendo a estas cosas que me gustan, es curioso ver la dinámica de conquista de una ciudad con todo el tema de las campanas. Y ahora, ¡comienza la batalla!
El primer ataque lo lanza Drogon, alias el Terror Plot Armor, que destruye todos los escorpiones que hace unos días su hermano no pudo esquivar, y finalmente revienta la puerta acabando con la Compañía Dorada.
Hay quien dice que esta forma de acabar con esos 20.000 hombres (aunque en pantalla parecen menos) es demasiado mala, pero yo creo que representa lo que es Juego de Tronos: aunque tengas un gran ejército, siempre puedes dejar de tenerlo de repente. Y ver a Strickland huyendo despavorido representa esa crueldad de la vida. Y el ejército entra en la ciudad.
Jon, Davos y Gusano Gris llegan hasta los soldados Lannister y Tyrion avanza viendo los destrozos que hay hasta el momento. Drogon se posa.
Y los Lannister tiran sus armas. “¡Tañed las campanas!” grita la ciudad (curioso ver cómo todos conocen el reglamento). Tyrion y Cersei observan a Daenerys mientras la espera se hace eterna. Y las campanas suenan. Cersei sabe que ha perdido. Tyrion mira aliviado a Daenerys. Esta mira a la Fortaleza Roja y alza el vuelo. Cersei la ve acercarse. Y entonces ocurre.
Dicen que cuando mueres ves pasar toda tu vida ante ti.
De repente vemos Invernalia, El Muro, Pentos, Meereen, Aguasdulces. Vemos reyes, legítimos y usurpadores, buenos y malos, de reinados largos y cortos. Aerys, Robert, Joffrey, Renly, Stannis, Robb, Mance, Tommen. Vemos familias, Casas grandes y pequeñas, Stark, Lannister, Targaryen, Martell, Redwyne, Umber. Guerras, batallas, hechos, Cinco Reyes, Aguasnegras, el Septo de Baelor. Vemos una historia como un todo. Y la vemos morir.
Una historia puede ser buena y puede ser mala, te puede gustar o no. Pero lo que no puede hacer una historia, es no tener sentido.
No tiene sentido que Daenerys, tenga la rabia que tenga, decida destruir la ciudad que se acaba de rendir. ¿Que la ciudad no se rinde? ¿Que quiere destruir la Fortaleza Roja? Perfecto. Entendible o no, es justificable. Pero esto no. Para mí la serie muere en este punto. Y esa que monta un dragón no es Daenerys Targaryen. No sé quién es pero no es la que ha creído toda su vida que era la última Targaryen sola en el mundo, la que volvió a traer al mundo las criaturas más maravillosas que existen, la que se ganó el apodo de Rompedora de Cadenas.
Los inmaculados siguen a esa del pelo platino y atacan a los soldados desarmados. Y a civiles.
Del encuentro entre Jaime y Euron tampoco hay mucho que decir. Fortuito de más, quizá. Y un final raro para Euron, sí. El plano de transición de una torre cayendo a la cueva muy correcto.
Una cosa que sí me gustó fue que se vieran explosiones verdes por la ciudad, porque claro, hay fuego valyrio bajo la ciudad. Es algo que de no estar no lo habríamos notado pero es un gran detalle.
Arya y el Perro llegan a la Fortaleza y el Clegane le dice que no le siga y se convierta en él (y muera), y le vemos como el verdadero padre que es, incluyendo gestos. El Perro sigue y se carga a dos Guardias Reales, se enfrenta a su hermano que pierde el control y mata a Qyburn, rápido y frío, como es Juego de Tronos. Y al fin vemos la Clegane Bowl, que comienza con un planazo.
El enfrentamiento es brillante, y el montaje que une su historia con la de Arya es genial. Que la Montaña repita lo de Oberyn es un poco regulero pero entiendo que es una forma de conectar con el momento en el que mató de forma desagradable. El caso es que Sandor consigue matar a su hermano empujándolo contra la pared y cayendo al fuego. De nuevo un cierre perfecto.
Cersei avanza sola y se oye un dragón de fondo. Entonces se encuentra con Jaime y olvida que ordenó matarle. Al final no la consigue salvar y ambos mueren aplastados. Como los buenos. De alguna forma se cumple el valonqar porque Cersei muere entre los brazos de su hermano.
Arya empieza a pasear por Desembarco que está muy bonita en esta época del año. Su correteo nos sirve para ver cómo está afectando el ataque a la ciudad y a los civiles (“Que reine sobre las cenizas”, decía su padre). Y también roza la muerte varias veces y se salva porque sí, porque esto no es Juego de Tronos. Al final un caballo aparece de la nada y Arya lo monta. En su momento, el youtuber Jordi Maquiavello entendió que era un símbolo de los Jinetes del Apocalipsis. “Voy a matar a la reina” resuena en nuestras cabezas. Pero no.
Es lo que tiene cambiar de director de un capítulo a otro, que digo yo que D&D podían haber visto el capítulo para saber que Arya se fue a caballo, pero no, en el siguiente aparece sin el bicho.
Jon y los suyos contemplan los restos del ataque y ven asombrados cómo Gusano Gris mata prisioneros, pero se quedan más asombrados todavía cuando ven que el Inmaculado se ha transportado hasta la Fortaleza Roja y ha llegado mucho antes que ellos. Mientras, Tyrion descubre los cuerpos de sus hermanos sin vida.
Daenerys, tras llegar con un gran plano y arengar a sus caballeros, ve cómo Tyrion renuncia a ser su Mano tras ver lo que le hizo a la ciudad y ella lo prende. Jon observa la escena, no se imaginaba la conquista así cuando veía los primeros capítulos de la serie. Luego se encuentra con Arya que nos deja una maravillosa cita, “voy a matar a la reina” sigue resonando.
Jon va a visitar a Tyrion a su celda, el Lannister reconoce que se equivocó y que Varys tenía razón, y ambos coinciden en que Jon no habría hecho lo que Daenerys. Y Tyrion analiza la evolución que ha tenido ella durante su vida. El amor es la muerte del deber, y a veces el deber es la muerte del amor.
“Eres el escudo que guarda el reino de los hombres”, Tyrion intenta convencer de que debe matar a Daenerys, ya que ahora está un poco resentido con ella, pero Jon no está muy por la labor.
Daenerys va al Salón del Trono, y todo se parece a la visión que tuvo en la Casa de los Eternos en Qarth, solo que lo que cubre el trono no es nieve, es ceniza. (O al menos eso pensábamos porque en el guion que se ha publicado hace poco dicen que es nieve, con dos huevos de dragón again). Daenerys se acerca al Trono y lo toca, ¿ha merecido la pena? Jon encara a Daenerys su actuación, lo que es una sorpresa.
Daenerys le intenta convencer de que todo irá bien, con un discurso sobre la moral un poquito rebelde, y Jon lo acepta, “Eres mi reina, ahora y siempre.” Y se besan.
Pero esto es Juego de Tronos, y en un último recordatorio de que no te puedes fiar de nadie, oímos una daga clavarse, y contenemos el aliento a la espera de saber cuál de los dos últimos Targaryen en el mundo ha acabado con el otro.
Daenerys muere en brazos de Jon, con incredulidad más que sorpresa. Es poético pensar que la historia del juego de tronos es la historia de Daenerys Targaryen, y que si uno termina el otro también. Entonces llega Drogon, que ve el cadáver de su madre y vemos cómo lo inunda la tristeza. Jon se prepara para morir, al menos ha hecho lo correcto. Pero el dragón en vez de quemarlo dirige su furia al Trono de Hierro y lo funde.
Y aquí sí que no.
En su momento se entendió que Drogon había comprendido que lo que mató realmente a su madre era la ambición de poder, y que por eso “mataba” el Trono de Hierro en vez de a Jon. A mí me pareció una jugada arriesgada, pero me gustó, era algo que no me esperaba. Los dragones pueden ser más inteligentes que los humanos.
Pero entonces llegan D&D, expertos en cagarla con declaraciones a posteriori, y al publicar el guion descubrimos que no. Ni metáfora política ni nada. Drogon se cabrea y cual niño pequeño, quema lo que tenga cerca. Sacado del propio guion:
“We look over Jon’s shoulder as the fire sweeps toward the throne– not the target of Drogon’s wrath, just a dumb bystander caught up in the conflagration”.
“No es el objetivo de la ira de Drogon, solo un TONTO ESPECTADOR en el conflicto” .
¿Acaban de llamar tonto espectador al Trono de Hierro?
Saliéndonos un poco del universo, un amigo mío se cabreó mucho cuando en el Episodio VII de Star Wars tratan de forma despectiva un sable láser, entendiendo que los nuevos encargados de la saga se estaban riendo de todo lo que significaba Star Wars. Yo aquí me siento igual.
El Trono de Hierro es el símbolo de poder de Poniente, simboliza todo cuanto amamos. Estamos dispuestos a verlo ir porque nada es para siempre, como las misma serie nos enseña. Pero no así. Así no D&D.
El caso es que Drogon se lleva a Daenerys y Jon se queda solo. Por qué Gusano Gris, recién nombrado general de los ejércitos de Daenerys y entendemos que mano derecha al no quedarle más consejeros, no mata a Jon al saber la verdad, cuando hemos visto que se ha vuelto loco, es una pregunta que jamás obtendrá respuesta.
Pasan las semanas y Gusano Gris lleva a un Tyrion con más barba aún a Pozo Dragón para que los grandes señores de Poniente le juzguen. Aquí vemos varias caras conocidas como Edmure Tully o el joven Arryn que hace mucho no salían, así como hasta cinco desconocidos incluyendo al nuevo Príncipe de Dorne. El guion incluye que a Gendry se le ha nombrado Guardián del Sur, entendible teniendo en cuenta el vacío de poder en Altojardín.
Aunque no hacía falta decir más chorradas, Davos le ofrece a los Inmaculados unas tierras en el Dominio porque sus habitantes “se han ido”, ¿a dónde se han ido y por qué? Y como notaremos más adelante, ¿dónde se han metido los dothrakis?
Cuando los demás preguntan por Jon, Gusano Gris les dice que no lo liberará pero Tyrion dice que eso debe decidirlo el rey o reina, y les dice a los Grandes Señores que elijan uno, y Gusano Gris acepta.
Tras unos instantes de tensión, Lord Edmure se levanta y se ofrece para ser el nuevo rey, pero Sansa le detiene. Aunque me parece un poco humillante para él, estoy contento de que haya vuelto a intervenir en la serie. Sam propone entonces la democracia, pero la idea hace reír a los lores de Poniente. Edmure da por hecho que Tyrion quiere la corona pero este lo niega, “la mitad del reino me odia por servir a Daenerys, la otra mitad por traicionarla”. Entonces, tras un discurso un pelín conveniente, dice que Bran debe ser rey porque las historias son lo que une a la gente. En su discurso hace hincapié en que es el Cuervo de Tres Ojos y por ello, la memoria del mundo y que no quiere reinar y no le importa el poder, algo que no recordaba hasta que volví a ver el capítulo; una sorpresa la verdad, pero bien recibida. Por fin vemos el resultado de aquella charla entre Bran y Tyrion.
Sansa, no sabemos muy bien por qué, sabe que Bran no puede engendrar hijos, así que Tyrion declara que cada vez que un rey muera, los grandes señores se reunirán en Pozo Dragón para elegir al próximo, instaurando un nuevo sistema más democrático, y de esta forma romper la rueda de la que hablaba Daenerys.
Bran parece sorprendido pero de alguna forma lo sabía y acepta, entonces todos votan a favor, salvo Sansa, que pide la independencia para el Norte que tanto ha sufrido, y Bran toma su primera decisión.
Durante la escena han sonado los temas de Juego de Tronos y “Goodbye brother”, tema de la casa Stark, y ha sido delicioso. Pero esto es un juicio y el nuevo rey sentencia a Tyrion y lo nombra su Mano, este parece que no le gusta pero todos sabemos que sí.
¿Pero qué hacemos con Jon? Pues mandarlo a la Guardia de la Noche, “¿Hay Guardia de la Noche?”, nosotros tampoco lo entendemos, Nieve. Aunque lo de que siempre tiene que haber un lugar para bastardos lo arregla un poquito. Mucha gente no entiende por qué no lo liberaron si los Inmaculados se iban a ir, pero es que Yara, Gendry y el nuevo Príncipe de Dorne eran leales a Daenerys y también había que tenerlos contentos.
Cuando Daenerys acaba de conquistar el Trono la imagen sugería que ya no había nada pero ahora los colores y todo nos dan a entender que hay más, puntazo a favor de la dirección.
Jon llega al Muro donde de repente hay muchos hermanos, y decide irse con los salvajes, que es lo que en el fondo quería, pero le sabe a poco y se le nota en los pelos que lleva. La similitud con la primera escena de la serie es evidente.
Sansa es proclamada Reina en el Norte y termina perfecta su historia, y Arya hace lo lógico, seguir los pasos de su ídolo Nymeria y ser exploradora. Los Inmaculados marchan a Naath sin saber que las mariposas de allí producen una enfermedad mortal para los que no han crecido en la isla.
En Desembarco, por algún motivo Brienne ha decidido dejar a Sansa y ahora es Lord Comandante de la Guardia Real de Bran, que ha elegido un cuervo como emblema, y está actualizando el Libro Blanco, pelos de punta con el “Murió protegiendo a su Reina”. Podrick también es Guardia Real y cumple la vital función de empujar la silla. En el Consejo, entiendo lo que quiere transmitir la escena de Tyrion colocando las sillas, pero no la broma del libro (el detalle del nombre sí): ¿en las crónicas de las guerras tras la muerte del Rey Robert no se menciona a la Mano de su heredero, que supuestamente lo mató, y más tarde Mano de la reina conquistadora?.
Sobre los nuevos miembros del Consejo, lo de Davos como Consejero Naval es lógico y lo normal; Bronn recibe su recompensa y ahora es Señor Supremo del Dominio y Señor de Altojardín, además de Consejero de la Moneda, raro pero entendible. Sam quiero pensar que está representando al verdadero Gran Maestre que aún no ha llegado de Antigua y que la Corona le ha perdonado la deserción. Bran revisa su consejo y me pareció graciosa la escena, parecen niños de colegio en su primer día. Bran abandona el consejo un poco porque sí y el debate sobre la reconstrucción de la ciudad termina, pasando por Davos que no sabía escribir hace unas temporadas corrigiendo a Bronn en un último gesto de brillantez, con Tyrion y su famosa anécdota.
Y sonando una versión diferente del tema principal de la serie, A Song of Ice and Fire, termina Juego de Tronos.
Conclusiones finales:
Habiéndola visto de nuevo, hay cosas que me han gustado más, pero no quita la pereza que me ha dado ver estos capítulos, cuando me puedo tragar escenas y escenas de otros de la serie. Lo de Bran era algo que se rumoreaba, pero siguiendo con la tónica de la independencia del Norte, pensaba que sería el Señor de un consejo que gobernara siete reinos independientes o algo así. No me parece descarado elegirlo porque al fin y al cabo la historia empezó con él. Pero creo que tendrían que haber hecho más énfasis en que no es Bran como tal, sino algo más como él mismo dijo, la sensación que se queda es de que al final sí era Brandon Stark.
Una cosa muy buena del final es que dejan todo organizado, enseñándote quien manda en cada reino y trayendo de nuevo personajes olvidados (este detalle se lo escuché también a Kai47).
La serie nos deja algunas dudas como quién era el Príncipe que fue Prometido, ¿Arya?, ¿Jon? ¿Y por qué en el teaser de la temporada se daba a entender que Arya y Sansa morirían y Jon no?
No sé si es bueno o malo, pero tengo muy claro qué es lo mejor y lo peor. Lo mejor de la temporada es el nombramiento de Brienne como Caballero de los Siete Reinos, y lo peor Daenerys destrozando una ciudad que ya era suya. Creo que se ha notado que D&D querían acabar rápido para irse a escribir a Star Wars.
Antes de despedirme quería aclarar que aunque me haya mostrado un poco hater, y quizás algo purista de los libros, soy un auténtico fan de la serie, la he disfrutado como un crío y jamás olvidaré cómo me emocioné cuando acabó el último capítulo.
Además, cuando acabó la serie salió el álbum de la banda sonora e incluía una versión de Rains of Castamere cantada por Serj Tankian, vocalista del grupo favorito de un servidor.
Para terminar y dejar buen sabor de boca, quería dejar por aquí dos vídeos que son verdaderas declaraciones de amor a esta serie y universo: el primero es una versión fan con letra del opening y el segundo una canción original hecha antes de la temporada por un youtuber famoso por hacer este tipo de contenido.
Hasta aquí la reseña de Antonerys sobre la octava temporada de Juego de Tronos. Ahora es vuestro turno, ¿Qué os pareció el final de Juego de Tronos?, ¿qué fue lo que más os gustó?, ¿y lo que menos? Y por último, os dejamos la encuesta de rigor para que votéis por vuestro capítulo favorito.
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