Análisis del cuarto capítulo de la octava temporada de Juego de Tronos.

Como cada semana, después del visionado del cuarto capítulo de la octava temporada de Game of Thrones, que podéis comentar y valorar aquí, hoy es el momento de reflexionar con el análisis del mismo. De la mano de los Escribas Leales que se ofrecieron voluntarios para llevar a cabo esta tarea, hoy continuamos esta sección con el hijo de Lyanna y Rhaegar Targaryen, @Jon Snow A.K.A.Targaryen, que ha decidido estrenarse en la web analizando el cuarto episodio de la última temporada de Juego de Tronos.

8×04: Los últimos Stark

— Jon Snow A.K.A.Targaryen —

En primer lugar, quería agradecer la oportunidad que se me brinda para poder expresar mis sentimientos, y tanto mi subjetividad como mi objetividad al mismo tiempo, sobre el capítulo cuarto de la última temporada de Game Of Thrones.

Para comenzar y ponernos en contexto, ha de recordarse que el capítulo anterior contó con la batalla más larga, oscura y polémica de todo Game of Thrones y, posiblemente, de la historia de la televisión. En dicha batalla murieron personajes secundarios, pero a su vez importantes para los protagonistas, aunque menos personajes de lo que uno cabría esperar. Jaime, Brienne, Tormund, Gusano gris, Podrick, los dragones… Aquí se salvó demasiada gente.

Piras funerarias

El capítulo comienza con un plano vertical en el que se nos enfoca tierra, ramas y suciedad. David Nutter opta por realizar este plano vertical y avanzar poco a poco, como si nos arrastrásemos por el lugar. Paulatinamente avanza hasta que vemos unos pies, un cuerpo… Ser Jorah, el Ándalo, es el primer muerto que nuestros ojos tienen el honor de observar. La primera pira funeraria. Dicha muerte consigue lo que ni la muerte de Viserion logró: el breve pero intenso llanto de la Madre de Dragones. Una Daenerys que rompe en una lágrima fugaz pero poderosa, una lágrima que baja por sus mejillas y se hunde en el cuerpo inerte de Ser Jorah.

La reina sin trono en estos momentos no es aquella mujer fuerte, poderosa y sin sentimientos que había sido hasta ahora. Esta pérdida ha destrozado y quebrado su armadura, pues nada le duele más que la muerte de aquel amigo leal que le amaba, que luchó por ella hasta su último suspiro.

La khaleesi sin khalasar se despide de aquel que debiera haber sido su Mano, con un beso en la frente, mientras la leve brisa se lleva sus lágrimas al son del viento. La cámara termina alejándose mientras Daenerys se queda fuera del plano, pues lo importante es la muerte de Ser Jorah. Un héroe. Valar Morghulis.

Emilia Clarke hace gala de una gran actuación durante esta escena, en la que nos muestra que, en ocasiones, puede ser buena actriz, o eso pensaba mientras la veía. Pese a mis pensamientos, todo esto se derrumba cuando damos paso a la siguiente escena. La más desgarradora para mi humilde opinión, que casi logra hacerme sucumbir en el sollozo más profundo. En el llanto más desesperado.

El acto arranca con Theon, cuya muerte fue para mí la más trágica, aunque no la más épica. Aquel cierre maravilloso de su personaje me pareció hermoso. Defendió al joven Bran hasta la muerte, viendo su fin a manos del villano más desaprovechado de la televisión.

El joven mitad Stark y mitad Greyjoy yace ahora en otra de las innumerables piras funerarias que han sido consecuencia de la garrafal estrategia de Jon, el hacedor de fracasos, Rey de nada. Volvamos, sin embargo, a Alfie Allen, pues aquí se va uno de los mejores actores de la serie. Me siento en la obligación de dedicarle mucho tiempo a este héroe-villano, pues creo que es el cierre total de uno de los personajes más trágicos, grises y redondos de la serie.

A su vera se encuentra Sophie Turner, quien nos regala una magistral clase de interpretación por su parte. Y si antes decía que Emilia lo había hecho bien, ahora me deja en entredicho, pues Sophie casi me hace llorar.

Hemos de entender sus sentimientos: Theon vivió con ella durante muchísimos años, era el mejor amigo de su hermano Robb, aunque luego les traicionó y saqueó Invernalia. Más tarde salvaría a Sansa (y a sí mismo) del psicópata de Ramsay Bolton y, para la matriarca de los Stark, eso es más que suficiente para ganarse su amistad y lealtad absoluta.

Abandonamos a Theon con una magistral y metafórica escena, en la que Sansa le deja su ¿pin? (Que narices es eso exactamente, que alguien me saque la duda) con el símbolo de la casa Stark, para que pueda descansar en el más allá sabiendo que murió en su hogar, mientras era llorado por sus seres queridos… su familia. Hasta nunca Theon, Valar Morghulis.

Daenerys y Sansa dan media vuelta para retornar con el grupo general y así observar desde lejos a los muertos. Luego volverán y los quemarán… Se podrían haber llevado las antorchas con ellas, digo yo. Así como idea para no dar vueltas. Sin embargo, esto tiene un sentido narrativo, pues nos sirve para divisar los rostros sombríos de quienes ganaron la batalla… ¿A un precio elevado (ejem, Jaime vive, ejem, Gusano Gris vive)? Vaya tos más tonta me ha entrado.

Volviendo al meollo del asunto, solo quiero hacer mención a Fantasma, quien hizo gala de su nombre, y fue tan fantasmal en la batalla que no le vimos regresar ni nada. Ha sobrevivido y es lo importante, tiene una oreja reducida a la mitad y heridas en el costado y la pata delantera derecha, pero ahí está él, en primera línea rodeado de extraños. ¿JON, DÓNDE DEJAS A TU LOBO? Prosigamos.

Qué tiempos aquellos cuando estaban unidos

El lobo blanco (no hablo de Fantasma) decide dar un discurso, porque siempre se le ha dado bien hablar, y si no me creéis, que se lo digan a sus compañeros de la Guardia de la Noche. Todos sabemos que le apuñalaron por mera envidia, se sentían inferiores por sus discursos y no aguantaban más. Sea como fuere, Jon da un discurso y vaya discurso, nada típico ni predecible.

Las piras han de prenderse tras las palabras del guardián del norte. Arya observa a Beric, Sam a Edd, Jon a Lyanna (¿A Lyanna? ¿Será un guiño porque su madre se llama igual o solo porque no ha muerto nadie más cercano a Jon y había que encasquetarle a algún personaje?).

A Jon no le va eso de mirar muertos, por lo que se gira para mirar a Daenerys. ¿Por qué? Pues debe estar cachondo entre tanto fuego y, seguramente, quiera templar su espada. Sin embargo, la reina albina no está contenta, le debe doler la cabeza y no está para jugar con Jon a las espaditas. Su sola mirada advierte a Jon que hoy no meterá ningún gol. Lo siento Jon, no eres Messi ni Cristiano.

Daenerys ve a su leal ser Jorah arder. Los rostros de Sansa, Arya y Danny frente a quienes dieron su vida por protegerles en algún momento son un poema, y uno bastante bueno, de Federico García Lorca o Miguel Hernández. El rostro Jon, sin embargo, parece el poema de un torpe y borracho altanero de un bar que suelta frases al tuntún… Que alguien le pague clases de interpretación a este muchacho; es más frió que el Rey de la Noche.

Celebración

No todo es tristeza ni intensidad, y tras la melancolía y la solemnidad llega la felicidad radiante. La victoria frente a los muertos necesita su celebración, pues aunque estamos sin víveres y el invierno ha llegado, que menos que un banquete para aquellos que han sobrevivido a la corta noche (me niego a llamarla la Larga Noche).

El plano de esta escena abre desde arriba, mostrándonos el gran salón de Invernalia, recordándonos a la primera temporada, al momento en que Robert Baratheon llegó y trajo consigo a media corte.

Alejando sus diferencias con el primer banquete que vimos, aquí no parece haber mesas divididas por clases sociales, sino más bien una distribución caótica y unida al mismo tiempo. Solo podemos advertir la distinción en la mesa principal, ocupada por Bran, Sansa, Jon, Daenerys, Tyrion y Varys ¿Qué narices pinta ahí Varys? Pensé que Missandei era su mano izquierda y no el eunuco; pero, bueno, he de suponer que Tyrion necesita hacer chistes de gente sin pene y no creo que Gusano Gris aguantase esas bromas, así que mejor meternos con el calvito de barriga prominente y mirada falsa.

No hay mucho que comentar aquí. Jon mira a Danny y esta tiene su ya habitual cara de quien huele mierda por primera vez, así que el calzonazos de Poniente no se molesta en hablar: decide obviar aquello y dirigir la mirada a otra parte.

A quien le gusta conversar es a Gendry, quien decide formularle una pregunta al Perro que todos nos hacemos en ese momento: ¿dónde narices está Arya? ¿Es que esta chica es antisocial? Huye más de una fiesta que Jon de las responsabilidades. La joven Stark es la heroína que salvó al mundo y creo que hablo por todos cuando digo que queremos que se la recompense correctamente. No nos preocupemos por ello, pues se ve que Gendry la quiere recompensar mostrándole sus dotes de montar a caballo.

Gendry, quien arde en deseos de hacer relinchar a la joven Stark, se dispone a salir en su búsqueda cuando de súbito Daenerys, con cara de pocos amigos, decide echarle en cara (al joven que ha sacrificado su vida y que ha peleado junto a ellos) los pecados de un padre que no conoció, porque todos sabemos que somos culpables de aquello que nuestros familiares hacen.

Un momento… ¿El padre de Danny no quería quemar Desembarco? ¿No mató a los Stark en un arrebato de locura? Ay, que despistado soy; ella es la Rompedora de Cadenas, la que No Arde y, por lo visto, también “la que no es juzgada”. Se me olvidaba.

Siguiendo con la escena a discutir, la reina muestra que tiene un sentido del humor digno de un robot, pero no de C3PO, que al menos sabe hacer chistes en ciertos momentos; ella tiene el humor de Terminator, pues la expresión al menos es la misma. La mujer más graciosa de Poniente decide nombrar de forma extraña a Gendry como el heredero de Bastión de Tormentas, legitimándole ya de paso como Gendry Baratheon (Edric Tormenta no existe en la serie y alguien debía tenerlo).

Qué hambre coño, tanto hablar y nadie habla de la buena comida del Norte.

Davos, quien se ha formado en Antigua dando discursos, decide salvar el momento tenso para que los norteños, como jóvenes de instituto esperando una pelea a la salida del mismo, vitoreen por el nuevo Lord Baratheon.

Tyrion entonces nos habla de algo obvio en estrategia, mientras Daenerys se cree heredera de Maquiavelo, pues piensa que aquello de legitimar a Gendry para tener un aliado la hace una gran estratega política. Ay, si Maquiavelo la viese sabría que tiene a su “príncipe”, en este caso princesa perfecta, quien hace honor a su libro. Ya podrá descansar en paz.

Sansa ve la estrategia y no le gusta un pelo. No entiendo esas miradas, pero ahí están. Soy team Sansa y me preocupa lo que hacen este capítulo con ella, pero continuemos.

Tyrion y Davos hablan sobre Melissandre, quien murió en paz, y aquello quita el sueño a Davos, quien quería darle con su espada y no en el mismo sentido que Jon a Daenerys. Tyrion, el enano melancólico, le habla de la felicidad a Davos, nadie mejor para ello.

Conversación de Bran con Tyrion sobre la silla. El tullido hace referencia a Daeron y su sobrino tullido. 120 años atrás afirma. Aunque mi memoria no es demasiado buena, no creo que sea esa fecha, pese a todo no trataré de sacar fallos. A fin de cuentas el canon de la serie es distinto. La conversación termina con Bran siendo alejado por un soldado random tipo: “niño, cállate ya, deja al enano vivir tranquilo”.

Acto seguido pasamos a una escena en la que los salvajes felicitan a Jon y luego a Daenerys, que decide brindar por Arya Stark, la heroína de Invernalia. Bien jugado, Dany, y no hace falta que digas “así me gano su simpatía”. Jon mira a Danny, Sansa lo ve y decide irse. ¿Por qué su hermano está enamorado de aquella que ha dado su vida por el Norte? Yo poco me fio de Dany porque me sé su historia entera, pero joder con Sansa.

Brienne, Tyrion, Podrick y Jaime deciden jugar al juego favorito de Tyrion. Momentos incómodos para mi persona, pues el acercamiento inevitable de Brienne y Jaime se hace palpable.

Sin embargo, la escena corta rápido para darnos la visión de Tormund, mama-tetas-de-gigantes, hablando sobre la batalla en una frase algo incómoda para Daenerys: “¿qué clase de persona se monta un puto dragón?”, se pregunta el barbudo, que tristemente ha sido reducido a un alivio cómico, tal y como ocurrió con Gimli en El Señor de los Anillos. Sin embargo, nuestro humorista preferido, el Dani Rovira de Poniente, se responde a sí mismo con un “Magnar o un rey” mientras todos vitorean al Rey mudo, que habla menos que Ilyn Payne.

La cámara entonces nos enfoca a Daenerys y vemos un plano significativo. Jon y Dany comparten mesa, la principal. Mientras que Jon habla con los soldados, amigos del norte, que le vitorean, le aprecian y le tratan como un amigo, ella se encuentra sola. Missandei y Gusano Gris están fuera del lugar, su khal está sin nadie, es khaleesi de nada. Varys es más sieso que una pared y Tyrion, el otro alivio cómico, está de copas con su hermano, con el clásico “¿conoces a Jaime?”

¿Conoces a Ted?

Yo soy reina y monto dragones desde hace tres temporadas, nadie me lo dice así

Jon, quien podría haber dicho algo al respecto, intenta ganarse la confianza de Dany y, ayudando a su amada, opta por callar y dejarla ir. Varys, como si fuese una sombra, persigue a Daenerys.

¿Me dejan sola? Pues me tomo un café del Starbucks y no invito a nadie, hala, to pa mí.

La escena de Tyrion y los demás bebiendo se intensifica, hasta que la virginidad de Brienne opta por aparecer. Tyrion, además, lo reafirma dos veces, pues no es bastante incómodo para todos con una. Tormund aparece en escena: “¿y quién es el cobarde que se cayó en mis pantalones?”. Son esas preguntas de Tormund Neruda las que nos mantienen vivos

Tormund le llora sus penas a un Perro que le da todo bastante igual. Las norteñas deciden consolar a ambos hombres besados por el fuego. El salvaje acepta, pero el otro solo desea a una norteña. Esta se le acerca y el momento SanSan se hace muy presente para todos los amantes de este amorío. Recuerdan su pasado y Sansa afirma que todos los que le han dañado la han hecho como es, pues ya no es un pajarillo, sino un águila dispuesta a cazar en el juego de tronos. Pese a todo, el Perro desearía habérsela llevado consigo y librarla de todo mal. Sansa, tras su discurso, decide retirarse mientras el Perro sigue bebiendo.

La fiesta continúa

Gendry encuentra a Arya practicando con el arco. Este decide hablarle sobre su nuevo título, con el fin de atraer su atención, porque todos sabemos que Arya se siente atraída por los lores. La pedida de mano resulta un desastre para el enamorado señor de Bastión de Tormentas. Las Stark siempre hacen daño a los Baratheon al final. Y como si Arya fuese Lyanna y Gendry Robert, cada uno tomará un camino distinto, pues Arya no es una Lady, y quien no lo entienda, es porque no comprende al personaje. Genial actuación de ambos, pero he de recalcar la brutal performance de Joe Dempsie, a quien le brillaban tanto los ojos como a Melisandre. De nuevo otro corazón roto; tendrá que seguir los pasos de Tormund y buscar a una norteña no Stark que alivie sus penas.

Cuando crees que todo te irá bien pero te rompen el corazón.

Brienne-Jaime

Una escena en la que Nikolaj muestra por qué es uno de los mejores actores de Game of Thrones. Hace de borracho casi tan bien como Tyrion. ¿Será cosa de familia? La escena del beso me resulta incómoda. Yo siempre pensé que ese amor no se consumaría y que sería algo respetuoso y de admiración, sin llegar a lo carnal. Sin embargo, en la serie, necesitan chicha y fanservice, por lo que de perdidos al rió y a Jaime le gusta escalar, como bien diría Tyrion más adelante.

Mientras tanto en los aposentos del Jon el Penas.

Daenerys quiere que Jon cabalgue en el dragón, o tan solo le calienta para luego hablarle de política, y pocos hombres quedamos con la mente fría después del calentón que no lleva a ninguna parte. Dany le echa en cara ser hijo de Rhaegar y que la gente le quiera, pues nadie la quiere a ella de esa forma en el Norte. Pobre Dany, nadie la comprende.

Dany sigue dándole al temita del trono… qué pesada, manipuladora y cansina se me hace. Cada vez se la ve más desesperada y, aunque la actuación es correcta, a mí me empieza a molestar demasiado su actitud. Sin embargo, Jon no se achanta y dice que debe contarlo, aunque Dany le trata de convencer y su mirada final da más miedo que Drogon.

Jaime despierta

¿Tanto bebí anoche? ¡Ay, por los Siete! Tyrion se reirá de mí durante toda la vida.

Planear la estrategia

Jon, el mejor comandante de Poniente, conocido por grandes éxitos como “me planto frente a la caballería yo solito” o “tiramos a los dothrakis a la muerte segura”. Las estrategias aquí están claras. Varys habla de un nuevo príncipe de Dorne (al cual dudo que veamos). Tyrion quiere la rendición de Daenerys y que llegue sin matar inocentes (¿dónde quedó el Tyrion inteligente? ¿Quién es este enano?). Sansa habla de esperar, recobrar fuerzas y luego atacar. A Daenerys no le parece inteligente, pues cree que es mejor atacar con un ejército cansado y hambriento a un ejército fresco y listo para el combate. Napoleón es un novato al lado de la todopoderosa Dany. No nos olvidemos de Jon, quien decide apoyar el plan sin sentido de su reina, pues todos sabemos lo que le gustan los planes arriesgados a este hombre.

Reunión Stark

La familia ha de estar reunida. Sansa carga brutalmente contra Daenerys; Bran, mientras tanto, está como si se hubiese fumado un porro; y el pobre Jon defiende al dragón sobre el que monta más a menudo (pista: no es Rhaegal).

Arya hace de mediadora en el enfrentamiento y comprende y apoya en parte a Daenerys, pero no se fía de ella. Tras unas cuantas frases no muy recalcables, y cuando la verdad sobre el pasado de Jon parece que será revelada, el fundido a negro nos obliga a no ver nada de la conversación. No culpemos a los pobres D&D, pues tienen claro que es mejor usar el tiempo de pantalla en un Jonerys o un Brienmie que en la revelación del pasado de Jon a sus dos… ¿hermanas-primas?

Bronn, el ninja del Aguasnegras

Conforme más escribo, más me doy cuenta de que me estoy estirando demasiado, por lo que seré más breve y conciso a partir de este momento. Bronn demuestra haber recibido el mismo entrenamiento que Arya en Braavos y es capaz de infiltrarse en Poniente con una ballesta.

Yo, personalmente, esperaba que llegase de una vez. Me ha parecido el Bronn de antaño, quizás algo pasado de rosca por el tema de pegar a Tyrion, pero estaba vacilándole y creo que quería demostrar que iba en serio. Me ha gustado que se recuerde la promesa que le hizo, aunque concuerdo con Jaime… ¿ALTOJARDÍN? Demasiado castillo para el codicioso Bronn.

Dos solitarios muy solos

Me ha encantado que Arya se vaya con el Perro, como antaño. Nos confirman la Cleganebowl, que después de tanto fanservice no esperaba que no se diese, y Arya alimenta aún más la teoría-profecía de que matará a Cersei. Pero no cuaja bien con las frases anteriores de que solo importaba la familia y todo ese rollo que le suelta a Jon.

Sansa y Tyrion

Otro plano más de dragones volando (porque mola). Tyrion trata de convencer a Sansa y esta se muestra negativa ante las palabras del enano. No obstante, ella dice algo que me deja extrañado: “la temes”. La sola mirada de Tyrion confirma la veracidad de tal afirmación. Luego la hija del que fue el hombre más honorable del Reino decide soltar el secreto que había jurado no contar.

¿Será por haber aprendido de Meñique, de Cersei y de Ramsay? No ha aprendido mucho de Ned, eso seguro. Políticamente, lo veo como un acierto si su objetivo es echar a Daenerys, pues cada momento que pasa se le ve más inestable y eclipsa a Jon. Y aunque soy Team Sansa, reconozco los errores, y para mí esto es un fallo enorme. No debía faltar a su palabra de esa forma…

Despedida de Fantasma

Aquí voy a soltar bilis. Primero iremos a lo sencillo: Tormund, quien ha luchado años por vivir al otro lado del Muro, se ve que ha decidido que el sur no es para él, aunque Jon afirme que es el Norte.

Ahora pasaremos a la despedida de fantasma. ¿DÓNDE ESTÁ LA ESCENA ÉPICA QUE NOS PROMETIERON? ¿Se referían a cabalgar al lado de Jorah? Me parece insultante, pero peor me ha sentado que se vaya al norte. Para eso podría haber muerto y Jon le podía haber llorado y todo hubiese quedado bonito, pero Jon ha encontrado una mascota nueva con la que surcará los cielos y, claro, un dragón es mucho dragón, pero tranquilos, el karma existe en Poniente.

Solo quiero remarcar que el hecho de que ni siquiera le dirija una sola palabra a su huargo no es “no comprender al personaje de Jon”; es “reírte del personaje, hacer una caricatura del mismo, escupirle, aplastarlo y cagarte en él”. ¿Qué narices tratan de hacer con esto? ¿Tan pocos conocimientos piensan D&D que tenemos sobre los personajes? Me parece lamentable.

Pequeña mención a Sam, el maestre conejo que pasaba más tiempo entre dos piernas que entre libros. Todo esto me genera una duda: ¿qué hará Sam? ¿La guardia se ha disuelto? ¿Será nuevo Lord Tarly? Espero que en el sexto lo resuelvan… pero lo dudo.

Batalla Naval

Missandei y Gusano gris se cogen de la mano. Qué tierno… Si Cersei lo viese moriría de amor. Sigamos. Tyrion revela el secreto de Jon a Varys; todos necesitamos un eunuco al que contarle nuestros problemas. Varys comienza a hablar de traición, pero Tyrion no está muy convencido de ello. Jon no quiere la corona, pero Varys está dispuesto a atarle al Trono de Hierro con una cuerda y obligarle a jurar servir al Reino; solo entonces por su honorabilidad aceptará, pues habrá jurado. Todo esto debe ocurrir en la mente de Varys.

Pasemos ahora a la escena de “batalla”: Daenerys debe estar como Bran… con miopía, pues no consigue ver la flota de Euron hasta que este derriba a Rhaegal de forma impactante y, a mi gusto, “bastante decente”. Sin embargo, la miopía de la reina no debe ser perdonada: ¿nadie se ha dado cuenta de que necesita gafas? Espero que perder el dragón le consiga descuento en multiópticas.

Aunque he de alabar sus reflejos, pues es posible que no vea un pijo de lejos, pero de cerca es más ninja que Arya. Una saeta enorme está a dos metros de su cara y la esquiva como si nada, sin despeinarse.

Soy una diva, mi pelo no se toca.

Se ve que Drogon luego aprende la misma técnica, pues a pesar de caer en picado de pronto rectifica y esquiva todas y cada una de las saetas que iban hacia él. ¿NADIE HA PENSADO EN ALGUNA ARMADURA QUE LE PROTEJA DE LOS IMPACTOS AL POBRE ANIMAL?

La batalla se resuelve, como ya ocurrió en la primera o segunda temporada, cuando Tyrion es golpeado, pierde el conocimiento y debido a esto nos perdemos la trifulca. Pero no os preocupéis, todos están vivos, los protagonistas no mueren, esto no es Game of Thrones, sino Disney… No, espera, Disney ahora mata a sus personajes, mierda, ya ni con Disney lo podemos comparar.

Sea como fuere, Missandei es capturada por la flota de Euron, por lo que el drama comienza a armarse para Dany, quien además de perder a su dragón (o el de Jon) ha perdido a su traductora y consejera más fiel. Ahora Jon se ha quedado sin mascota, vaya por dios.

Días más tarde en King’s Landing

El bueno de Euron ha dejado embarazada a Cersei (o no). Me gustaría recalcar la magistral interpretación de Lena Headey, cambiando el rostro tres veces en un momento. Primero preocupada e incómoda, luego feliz y termina incómoda. Pobre Euron, no aprendió nada de los cotilleos sobre los hijos de Robert.

El plano que antes enfocaba a Cersei se mueve paulatinamente hacia la derecha y nos da una vista hacia la entrada de Desembarco del Rey. Allí se congregan miles de personas. El plan de Cersei es digno de una villana de Disney, se protege con el pueblo. Además, tiene un rehén.

En la mesa de Rocadragón cantaban y cantaban…

Varys ha pasado de ser un tipo con mente política y capaz a parecerse a ese personaje de Los Simpson cuyas apariciones se reducían a “¿es que nadie se preocupa por los niños?”. Ahora es un alma caritativa que protege al pueblo, tal y como dijo en la primera temporada, y tan distinto al Varys de los libros. Nuestro eunuco favorito aconseja no masacrar vidas y Tyrion está de acuerdo, pero Daenerys no está muy convencida con dicho plan. “Sangre y fuego”, dice el lema de su familia, y le queda solo un bicho-escupe-fuego. Pronto va a ser sangre simplemente.

Tyrion da una estrategia (otra más) que veo algo absurda. Pídele la rendición a Daenerys, dice el enano Lannister, como si Cersei fuese a decir “ah bueno, si me lo pedís así, no tengo más remedio” y os diese la corona. Daenerys, que siempre fue algo cruel y ahora se le está pasando un poquito la rosca, decide que es una buena idea, pues así el pueblo sabrá que ella quiso negociar y podrá quemarlos a todos mientras piensa que es buena persona. Genialidad, D&D, qué bien construís personajes.

En la sala del trono donde Aegon una vez se sentó

Varys, quien antes tramaba en secreto y jamás sabíamos sus intenciones, ahora decide comentárselo tan fácilmente a Tyrion no solo hablando de traición a su reina, sino incluso hablando de muerte. Tiene razón, sin embargo, en eso de que Daenerys se comería a Jon en el matrimonio que muchos esperan, pero creo que al menos de momento es la mejor opción.

Tyrion dice que “es traición” y ahí queda la cosa. Yo pienso que el enano lo va a contar, Varys va a aprender a despegar la cabeza de los hombros y a Dany se le va a ir tanto que Tyrion va a decir “hostia, quizá tenga razón” y al final reinará Jon. Siempre pensé que sería Jon y que Dany moriría; pero que lo haría contra los muertos, no contra Cersei o a manos de Jon o inclusive Arya, que por lo visto es la verdugo de Poniente.

Más de Brienne y Jaime

Esta pareja no va a ningún lado y quiero terminar pronto con estas dos escenas, pues son absurdas. Jaime, que no pinta nada en Invernalia, va por ahí dando vueltas aburrido hasta que ve a su amante. Entonces decide hablar con ella, pero antes de eso Sansa, la tirapullas del norte en esta temporada, debe soltar un zasca.

La escena siguiente nos muestra un Jaime serio y preocupado; se ve que Brienne es muy buena guerrera, pero a Cersei se le da mejor jugar con las espadas. Así pues, pasamos a otra escena en la que Jaime decide marcharse con Cersei. “No eres como tu hermana, eres un buen hombre”, le dice la mejor caballero de los Siete Reinos. Pero Jaime, que anhela volver a los brazos de Cersei, le dice “tiré a un niño por la ventana por Cersei, maté a mi primo por Cersei, habría matado a cada hombre, mujer y niño de Aguasdulces por Cersei”. Aquello le rompe el corazón a la mujer; hace todo eso por Cersei, pero no por ella.

Al final, Jaime se larga, rompiendo un corazón y destrozando su arco de redención. Les diría un par de cosas a D&D, pero creo que esta parte la debió escribir un mono mientras se esnifaba cocaína porque, si no, no lo entiendo. El romance entre estos dos ha durado un capitulo y lo que podría haber terminado como el respeto y admiración que sentían el uno por el otro, ahora queda como una relación pasajera que no lleva a ningún lado…

Negociaciones

El plano abre desde los Inmaculados y hace un movimiento mostrándonos a las caras mas visibles del ejército Targaryen, de Varys, Gusano Gris (estos dos están muy cerca, supongo que no tener huevos hará como los imanes, que se peguen) Daenerys y Tyrion.

Ay qué miedo, Gusano Gris, protégeme con tu vida.

Antaño se mandaban cuervos, mensajeros… ahora llevas todo tu ejercito a las puertas de Desembarco y te expones ante el enemigo (gran estrategia). Pese a todo, Cersei no decide matarlos, aunque tiene ahí las ballestas gigantes necesarias para matar a Drogon, que se encuentra unos metros más atrás tranquilito y observando, porque Dany decide traerlo. Por supuesto, si te acaban de matar uno, lo lógico es llevar al otro a las puertas. Lógica made in D&D.

Comienzan las negociaciones. Tyrion, el Lannister más amado por Cersei, camina hacia Qyburn y trata de ganárselo con lloriqueos y un “eres racional”. Este le manda a paseo, por lo que Tyrion decide pasear hacia las puertas. Se expone totalmente y Cersei, la asesina Disney, por lo visto tiene honor en ciertos momentos y no le mata, aunque era el momento perfecto para quitarse al hermano que asesinó a su padre y al que odia desde que nació. Sin embargo, no hace nada. Tyrion da un discurso de “eres humana, hay bondad dentro de ti” y Cersei entonces se da cuenta de que hay algo dentro suya, pero solo es un bebé de padre cuestionable, por lo que la bondad no la encuentra y decide asesinar a Missandei ante todos.

La muerte es épica, lo mires como lo mires. No me gusta el personaje; jamás me ha interesado, pero ese “Dracarys” ha calado más en mí que todos los que suelta Daenerys a lo largo de cada capítulo. La Montaña decide hacer que su cabeza vuele y entonces Gusano Gris se enfada y queda en shock. Tyrion queda muy decepcionado y Daenerys se enfada. Valar Morghulis, Missandei.

Los planos usados por David Nutter son simples pero efectivos. Con los tres cabecillas del ejército Targaryen muestra un plano picado, lo que nos muestra que están perdiendo; tienen menos poder. Sin embargo, cuando hemos de ver a Cersei, la vemos en un plano contrapicado que la empodera; es ella quien está ganando la guerra (por ahora).

El capítulo cierra con un plano en el que Daenerys se marcha del lugar con cara de enfado o de que no le ha gustado la comida. La gente ve locura en esta escena; yo solo veo una rabia justificada por haber matado a su dragón y a su consejera más leal.

Conclusión

El capítulo ha estado bien a grandes rasgos. Tiene momentos en los que desvirtúa a Jon y Sansa, pero los demás personajes los veo bien, en su línea coherente con la serie (no los libros). Hemos tenido el “juego de tronos” con sus maquinaciones pertinentes, también amores rotos (cosa que a muchos les encanta, no a mi), una “batalla” con un dragón muerto, el final de Missandei y la despedida de Fantasma (no sé si prefiero eso o que se lo carguen…)

Sin embargo, a mí esto me encaja con la primera mitad de la temporada, no con la última, aunque la mayoría de las personas por Twitter y de los que yo conozco afirman que Cersei es mejor villana, así que D&D no lo hace tan mal para el gran público.

¿Y vosotros que esperáis de ahora en adelante? Yo por mi parte solo espero que tenga coherencia y que los monos que hacen los guiones sean remplazados por elefantes, para que así al menos Cersei muera tranquila, sabiendo que un elefante decidió como moriría.