Análisis del capítulo 1×05 de House of the Dragon.

Una semana más, después del visionado del quinto capítulo de House of the Dragon, que podéis valorar aquí, llega el momento de reflexionar sobre lo que hemos visto. El Escriba Leal que nos presta hoy su punto de vista es @Maegor III (Leed Abercrombie), otro de nuestros habituales en la caja de comentarios. Aunque ya nos deleitó con su voz en el podcast del 4º Aniversario de la Compañía Libre de Braavos, aún no nos había deleitado con su pluma. Sin embargo, hoy, en el Día de su Nombre —Leales, alzad todos vuestras copas—, se estrena con la reseña de este capítulo.


House of the Dragon

1×05: Iluminamos el Camino 

— Maegor III —


Tras cinco semanas, hemos llegado por fin al ecuador de la primera temporada. Iluminamos el camino es el último capítulo que tenemos antes del salto temporal grande, por lo que debería sentirse casi como un finale ¿dará la talla?

Como le ha pasado a muchos, tengo sentimientos encontrados con este capítulo. Si le quitases los primeros cinco minutos y los últimos diez, quedaría un capítulo muy sólido. Pero como no somos Ramsay, no podemos trocear el episodio sólo para quedarnos con los que nos gusta. Dentro de todo, considero una suerte que me haya tocado la reseña de este episodio, pues me permite desahogarme sin necesidad de escribir un tochaco en la sección de comentarios1. Vamos a ello, pues.

Antes de comentar todo lo que me chirría sobre la escena de El Valle, voy a señalar las cosas positivas. Me ha caído bien Rhea Royce, si nos la hubieran mostrado un poco más, seguramente me habría dado más pena su muerte. Me han hecho gracia algunos de sus comentarios, como cuando invita a Daemon a tirarse una oveja (es bien sabido que a los valyrios les mola ese rollo) y el «nunca eres capaz de acabar nada», algo que tanto Mysaria como Rhaenyra pueden confirmar.

En cuanto a lo malo, pues todo lo demás. Primero que nada, la caracterización de Daemon en esta escena no me gusta nada. Aparece de la nada con un disfraz de Assassin’s Creed del todo a cien y no dice una sola palabra. ¿Por qué HBO tiene esta extraña creencia de que un personaje se ve más malote e intimidante cuando no habla? Es esta lógica la culpable de crear al Rey de la Noche, probablemente uno de los villanos más aburridos en la historia reciente de la televisión.

Daemon es el Príncipe Canalla, tendría que estar devolviendo las puyas a Rhea, regodeándose un poco antes de matarla (suponiendo que ese fuese el plan, que ahora vamos a eso), no quedarse callado en plan incómodo. El Príncipe de la Ansiedad Social, le vamos a tener que llamar.

Tras ver varias veces la escena, sigo sin entender qué se supone que ha pasado. Rhea se cae del caballo un poco porque sí. ¿Fue un accidente? ¿Alguien lo wargeó? He leído una teoría de que el caballo se puso nervioso porque Daemon olía a dragón, pero no hay nada en la escena que nos indique eso y, de hecho, ni siquiera tenemos antecedentes de animales poniéndose nerviosos por el olor a dragón en la serie.

Y esto me sirve para irme un poco por la tangente y comentar un problema que siempre ha estado ahí, pero que en este episodio parece haberse agravado: la serie muchas veces no explica nada. Y no me malinterpretéis, está bien que se intente ser sutil y no darle todo mascado al espectador, pero llega un punto en que simplemente se siente confusa porque los guionistas no tenían el tiempo o las ganas de explicar algo o, peor aún, ni siquiera sabrían explicarlo si se lo preguntases. A lo mejor los Inside the Episode aclaran cosas, pero rara vez los veo. Y aunque lo hiciesen, el producto debería entenderse por sí mismo, sin requerir a explicaciones externas o al material que está adaptando.

En cualquier caso, esta escena con Rhea Royce me sobra. Introduce un personaje sólo para matarlo, es difícil de entender exactamente lo que está ocurriendo y en parte se carga el misterio del papel de Daemon en la muerte de su mujer. Hubiese sido mejor que no hubiesen puesto esta escena y nos dejasen con la duda de si Daemon la mató o no. Se ahorrarían cinco minutos, que podrían usarse para desarrollar un poco más otros aspectos acelerados de este capítulo, y de paso no tienen que pagar el sueldo de la actriz de Rhea. Todo ventajas.

Mysaria, recuérdame que no vuelva a comprar nada de AliExpress. Fui el hazmerreír de la ExpoManga…

La siguiente escena es la despedida entre Otto y Alicent bajo la lluvia. Creo que es la primera vez que vemos paraguas en Poniente, desde luego en los libros no me suena que se mencionen jamás. Como dato curioso, aunque existen desde hace unos 3.000 años, en la Edad Media los paraguas no eran algo común y en general no los usaban para cubrirse de la lluvia, sino como un signo de prestigio.

¿De qué estábamos hablando? Ah, sí, la despedida de los Torrealta. Otto le dice a Alicent que Rhaenyra es un peligro para sus hijos (un argumento que, quizás, tendría que haber usado un poco antes) y consigue sembrar la duda en la reina verde. Por cierto, ¿os dais cuenta de que Otto siempre llama a Alicent «hija»? Mi headcanon es que no se acuerda de su nombre.

—Siempre podrás encontrar otro trabajo, ¿verdad, Padre? —Hija mía, estudié diseño gráfico. Obviamente no.

Antes de irnos a Marcaderiva, vamos a hablar de la mejor escena del episodio que, casualmente, contiene al mejor personaje de la serie2. Así es, hablo de la introducción de Varys Larys Strong, el Patizambo. Sí, es cierto que nos lo habían presentado en la cacería real, pero eso no fue más que un cameo. En este capítulo pasa a ser un personaje de verdad, y menudo personaje, dejad que os diga. Me gusta mucho la forma en la que el actor lee sus líneas, de verdad que consigue ese aire de manipulador hijo de puta que tanto me gusta. Con sólo esta escena, Larys se ha convertido en mi personaje favorito, lo cual no sé si habla muy bien de él o muy mal del resto de personajes.

Larys empieza su conversación soltándole a Alicent una chapa sobre flores (¡nunca me había sentido tan identificado con un personaje, OMR3!). Las convallis —malváceas— son unas flores autóctonas de Braavos, que, sin embargo, han aparecido también en el Bosque de Dioses de Desembarco. Habrá quien piense que Larys está intentando establecer una comparación entre las flores y Alicent (una «forastera» entre los dragones), o con el arciano (un símbolo de los Dioses Antiguos en una ciudad que ya no cree en ellos) o incluso que las compara consigo mismo (un cojo en un mundo en el que se espera de los hombres que sean guerreros)… Pero no os dejéis engañar, esto sólo era un preludio de Larys para hablarle a Alicent del Lemongate4.

La reina, que es una casual y no quiere aceptar en su corazón que B+A=D, intenta dar por zanjada la conversación hablándole del tiempo. Al Patizambo esto no le hace gracia y decide arruinar su amistad con Rhaenyra contándole lo del té. Es muy interesante que Larys tenga constancia de esto, no sólo sabe que el Maestre Mellos le entregó té de la luna a la princesa, sino que además sabe que fue por orden del rey.

Me pregunto cómo se ha hecho Larys con esa información… ¿Tiene espías? ¿Conoce los pasadizos? ¿Está wargueando a las ratas? Lo último lo he dicho un tanto en broma, pero lo cierto es que no es del todo descartable, nos han presentado al personaje en frente de un arciano, después de todo. También podría ser que lo supiese por Mellos directamente, que Larys forme parte de la conspiración de los maestres. Por lo poco que he leído de él, no me parece descabellado.

– Y claro, de aquí podríamos llegar a la conclusión de que «la princesita» de Aero Hotah es en verdad Dani, pero como Bran del futuro ha alterado sus recuerdos… – Señor, déjeme irme a mi casa, que me estoy poniendo verde ya.

Marcaderiva se ve estupenda, pero el que no se ve tan bien es el pobre Viserys. Teniendo en cuenta que va a sobrevivir al salto temporal de la semana que viene, han ido muy rápido con su enfermedad. Por el fandom circulan varias teorías de qué es lo que tiene Viserys ¿psoriagris? ¿lepra? Tendría que ser una enfermedad que no fuese contagiosa. Yo creo que es un síndrome de abstinencia chungo por estar más de dos días alejado de sus maquetas.

La sala del trono de los Velaryon también se lleva mi aprobación. Me molan mucho las caracolas gigantes, las esfinges, el trono hecho con madera de barco. Y la negociación de matrimonio ha estado guay, muy buen papel tanto de Rhaenys como de Corlys, al cual esperaba ver más cabrón, pero se ha comportado con mucha dignidad. Bien por él.

Es una pena que no vayamos a verle más, pero Joffrey Lonmouth me ha caído muy simpático. Es bromista y juguetón, lo que se siente como un soplo de aire fresco en una serie en la que los personajes están constantemente enfadándose y sufriendo. Laenor en general aceptable, pero lo he notado opacado por Joff.

Me gusta mucho también la conversación en privado entre Corlys y Rhaenys. Le dan un poco más de profundidad a la Serpiente Marina, mostrándonos que sigue cabreado por el Consejo del 101 y que se encuentra en fase de negación con respecto a la sexualidad de su hijo. Por otro lado, es curioso ver como Rhaenys, que hace unos años estaba dispuesta a casar a su hijita pequeña con Viserys, se opone a esta unión. Pero no es incoherente para nada, la existencia de Aegon hace que el matrimonio de Laenor sea mucho más peligroso que el que en su día pudo haber tenido Laena.

Ya en el barco, tenemos la conversación entre Crispín y Rhaenyra. Antes de ver la escena, me esperaba que el conflicto iba a nacer por un fallo de comunicación entre los dos, en el cual Rhaenyra no le dejaría claro al caballero todo el asunto de la homosexualidad de Laenor, y él pensaría que va a dejarlo definitivamente por el Velaryon. Sin embargo, no fueron por ahí del todo los tiros.

Cole no quiere ser «la puta» de Rhaenyra, aunque honestamente no sé qué diantres esperaba este chico. Siendo guardia real, y encima de baja cuna, es lo máximo a lo que puede aspirar con la princesa.

Como Criston está muy arrepentido por romper su juramento de castidad, la única solución que se le ocurre es volver a romper su juramento abandonando al rey y fugándose con la princesa a vender naranjas o algo así. Rhaenyra le dice que tiene un deber con el reino y empieza a soltarle el rollo de que Aegon unió a los Siete Reinos. Crispín se marcha y la deja con la palabra en la boca. Ahí tengo que romper una lanza en favor del guardia real, si hubiese dedicado toda mi juventud a luchar contra dornienses, también me tocaría un poco los huevos lo de «Iigin inií lis Siiti Riinis» .

¿Cómo que no hay solteras calientes en mi zona? ¡No juegues con mis sentimientos, Rhaenyra!

Los sustos no acaban para Crispín, el cual recibe la llamada de la reina Alicent. La charla entre la reina y el caballero tiene un poco de gracia, entre lo incómodo de la situación (¿de dónde vienen esas confianzas, Alicent, pidiéndole que se siente a tu lado?) y la pequeña confusión entre ambos, mientras Alicent simplemente quiere saber si Rhaenyra se acostó con su tío, Cole piensa que le han pillado.

Al final, el malentendido se aclara parcialmente cuando Criston confiesa su crimen. El guardia real sólo tiene un favor que pedirle a la reina, y yo pensé que iba a decir algo como «matadme en secreto y que esto no se haga público para no arruinar la imagen de Rhaenyra«, pero lo que le pide es que le mate directamente, sin torturarle primero. O sea, no sé por qué asume que lo iban a torturar. Tiene una imaginación muy activa el Crispincito, esperemos que no le afecte en un futuro… Alicent lo perdona, digo yo que para utilizarlo como ficha luego, aunque es posible que lo haya hecho por verdadera compasión hacia Cole (recordemos que no está vestida de verde todavía, así que no es Dark Alicent aún).

Y llegamos a la boda. Volvemos a ver a ser Hugh del Valle Jason Lannister, que es lo más cercano a un alivio cómico que hemos tenido de momento en la serie. Aunque el humor lo genera por la vergüencita ajena que da, no tanto por sus chistes. Creo que lo decimos todos los capítulos, pero qué falta hace aquí Champiñón. Nunca te lo perdonaré, Peter Dinklage.

En esta imagen podemos ver a uno de los peores seres humanos que han habitado el planeta Tierra, literalmente escoria humana. A su lado, Peter Dinklage, que no es mal tipo, pero un poco bocachancla.

También viene Daemon, el cual había sido exiliado por su hermano como muchísimo hace un mes, y nadie le dice nada. Entiendo que el calzonazos de Viserys nos demuestre una vez más que no tiene huevos, pero hubiese estado bien que alguno de los presentes le hubiese increpado (Corlys, Lyonel Strong o incluso ser Crispin, que está con muchas ganas de pelea). Se sienta, sin decir palabra por supuesto, y la fiesta sigue un poco como si nada.

Llega Dark Alicent con su flagrante vestido verde, lo cual al parecer sorprende a los invitados mucho más que el retorno del hermano cabrón del rey. Larys le cuenta a su hermano que cuando Antigua va a la guerra, encienden una luz verde en el faro (¿fuego valyrio?). No sé si es algo que sale en Fuego y Sangre o si se lo han inventado, pero me mola el concepto. También me da curiosidad la relación entre Larys y Harwin, que al menos en esta escena parecen llevarse bien. Me recuerda un poco a la relación de Jaime y Tyrion, el hermano mayor fuerte y el menor débil y astuto.

Tras recuperarse del shock del paseíto de la reina, el malvado Viserys suelta su discurso de villano sobre cómo este matrimonio va a servir para mantener y aumentar el número de armas nucleares en Poniente. Por suerte, los maestres, guardianes del conocimiento, están aquí para impedirlo. Tenéis los días contados, cabrones de Valyria.

Empiezan los bailes y la verdad que los veo bien raros. Pero no es culpa de la serie, supongo que los bailes de la época eran así. Pero menuda oportunidad desperdiciada para ver al maestre Mellos perrear o a Jason Lannister haciendo un bailecito del Fornite.

En cualquier caso, Joffrey Lonmouth, cuyo coeficiente intelectual parece que rivaliza con el de nuestro Larys, sólo necesita echarle un vistazo rápido al rostro de estreñido de Crispín para descubrir que es el amante de Rhaenyra. Todo esto se podría haber evitado si Criston hubiese hecho como el resto de sus compañeros de la guardia y llevase el casco puesto.

Joffrey va a confirmar sus sospechas con el guardia real, mientras Daemon vuelve a intentar ligarse a su sobrina. Esperemos que haya pillado viagra de camino al Valle, porque si no ya sabemos cómo va a acabar el asunto. El baile incestuoso es interrumpido por culpa de la escena más absurda de lo que llevamos de serie.

Antes de echar mierda de todo lo que viene a continuación, vamos a centrarnos una vez más en los aspectos positivos. Por ejemplo, creo que es un gesto muy bonito por parte de Condal el haberles dejado a D&D escribir una escena, porque la falta de coherencia de la pelea en la boda tiene las incoherencias marca de la casa. No desentonaría para nada en las últimas temporadas de la serie.

Para empezar, no nos dicen en ningún momento cuál es la motivación de Ser Cole o qué es lo que inicia el conflicto. He visto el argumento de que Joffrey le estaba intentando chantajear, pero a mí no me ha dado esa impresión para nada. Y si esa era su intención, es muy malo jugando este juego, pues inmediatamente le confiesa que es el amante de Laenor, o sea que ya le da un secreto con el que Criston puede hacerle contrachantaje. Y no nos olvidemos que al final del día, Joffrey no tiene ninguna evidencia del sexo entre Cole y Rhaenyra, así que cualquier acusación que hiciese caería en saco roto.

Pero la motivación de Cole da un poco igual, ya sea porque Joffrey le estaba chantajeando, porque quiere cargárselo para que su secreto no peligre, o por lo que sea, el problema aquí es que no hay ninguna razón lógica para intentar asesinarlo delante de cientos de testigos totalmente porque sí. Sobre todo, cuando en un par de días había un torneo y podrías haberlo matado «por accidente» (que, de hecho, es lo que pasa en los libros).

Y ni siquiera sé cómo se supone que empieza el conflicto, porque cuando termina la conversación entre Joff y Cole, vemos al primero irse a hablar con Leanor, mientras el segundo le echa una miradita de pocos amigos ¿Debo suponer que Crispín les siguió y se lio a hostias? Da la impresión de que falta una escena y, una vez más, en este caso no se siente como una sutileza, sino como mala escritura. Es como que los guionistas querían que Criston asesinase a Lonmouth en mitad de la boda, pero no se les ocurría cómo escribir el conflicto de forma orgánica, así que la solución fue empezar el conflicto fuera de cámara y listo.

Esto podría tener un pase, de no ser porque todo lo que ocurre a continuación es aún más estúpido e incoherente. ¿Me puede explicar alguien cómo cojones se va Cole de rositas? Es que ni siquiera ofrece ningún tipo de justificación para el asesinato de Joffrey, ninguno de los presentes sabe qué ha pasado, lo mínimo es que lo arresten y le hagan un juicio… Y si se saltan el juicio y lo mandan directo al Muro o lo ejecutan, no se podría quejar.

He visto a gente decir que, claro, como Viserys estaba desmayado nadie podía ordenar que lo arrestaran. Eso es una estupidez como una casa (del dragón) ¿Acaso si Viserys no está presente Desembarco es una tierra sin ley donde asesinos campan a sus anchas sin represalias como si se tratase de la purga? ¿De verdad quieren que me crea que Corlys Velaryon, uno de los hombres más orgullosos y poderosos de Poniente, ve a un caballero darse de hostias con su hijo y asesinar a uno de los amigos cercanos de éste y dice «jolines, es que no puedo hacer nada porque Viserys está de siestecita» ? ¡No me jodas!

También he visto a gente decir que es que Cole queda impune porque cuenta con el favor de Alicent. Primero que nada, por mucho favor que tenga, ha cometido un crimen delante de cientos de testigos. Alicent podría intentar ayudarle durante el juicio, pero no evitar que lo arresten. Pero es que, aunque de alguna forma la reina verde pudiese sacarle las castañas del fuego, NO LO VEMOS, vemos a Criston irse de la sala sin que nadie haga nada, y no vemos en ningún momento a Alicent interceder por él.

Si la idea era que Alicent lo defendiera, podrían haberla hecho decir algo cómo «Cole sólo estaba haciendo su trabajo, vi a Lonmouth intentando asesinar a Rhaenyra» o algo por el estilo. Es una historia que hace aguas por todos lados y, aun así, Crispín tendría que ser arrestado y llevado a juicio, una noche en el calabozo no se la quita nadie. Pero al menos me transmiten la idea de que es Alicent la que permite que Cole salga airoso. Pero como no hay nada de esto, son los fans los que tienen que hacerle el trabajo sucio a los guionistas inventando posibles explicaciones para una escena que no se sostiene por ningún lado.

Pero eso no es todo, nuestro asesino favorito llega al Bosque de Dioses y se dispone a suicidarse frente a un árbol corazón… ¿Y esto a cuento de qué? Hasta donde me consta, Cole es creyente de la Fe, no de los Antiguos Dioses, es como si un católico decidiese suicidarse delante de una mezquita. Tampoco es que el Bosque de Dioses de Desembarco tuviese alguna conexión especial con el caballero, si al menos hubiésemos tenido escenas de Rhaenyra y él frente al arciano… pero no.

Y luego tenemos la boda que se hace como una ceremonia privada un poco porque sí. Al parecer la muerte de Joffrey no es suficiente como para que arresten a Criston, pero sí para cancelar todos los planes que había con respecto a la boda. Luego hay un intento de engañar al espectador haciéndole pensar que Viserys se muere, pero como en el tráiler del siguiente capítulo lo muestran vivito y coleando, no engañan a nadie. Por último, tenemos a una rata bebiendo del charco de sangre (no hagas eso, Larys, te va a hacer mal a la tripita).

¡Joder, Condal! Ha estado increíble la pelea de la boda. Nos faltó nomás un Ramsay sin camiseta y una que otra violación, pero por lo demás chapó. 9/10.

Pues eso ha sido Iluminamos el Camino, el último capítulo antes del salto temporal grande. Lamento que la crítica haya salido tan negativa en comparación con la de los leales que me han precedido. Pero ¿qué puedo decir? Soy un poco criticón y la última escena invita a ser despedazada (y me he dejado cosas en el tintero para no alargarlo más, como la desaparición repentina de Daemon o la inutilidad de la Guardia Real).

Me da mucha pena, porque para mí el final jode mucho un capítulo que de otra forma habría estado muy bien. La introducción de Larys es fantástica, las escenas de los Velaryon son muy buenas, Joffrey es muy agradable de ver (a diferencia de su tocayo) para el poco tiempo en pantalla que tiene. La escena del Valle también sobra, pero al ser más corta y ocurrir al principio soy capaz de perdonarla.

Como valoración final del mega-prólogo que han sido estos primeros cinco capítulos, La Casa del Dragón me parece una serie bastante sólida. La encuentro más disfrutable que las últimas temporadas de Juego de Tronos, creo que a nivel técnico suele verse espectacular, los guiones son decentes (excepto en determinadas escenas) y las actuaciones me han gustado bastante.

Por el lado negativo, siento que no me ha llegado a «enganchar», disfruto ver los capítulos, los encuentro entretenidos, pero tampoco me paso la semana esperando a que llegue el siguiente (tengo más interés por comentar el capítulo con vosotros, que por verlo) y el ritmo me parece algo apresurado. Espero que ahora con el salto temporal la cosa mejore.

En cualquier caso, gracias por llegar hasta aquí (también os digo, yo en vuestro lugar habría parado de leer en cuanto empecé a divagar sobre el uso de los paraguas en Poniente) y muchas gracias a la Compañía por darme este pequeño espacio para lamerle el culo a Larys Strong y quejarme de tonterías. Parece mentira que llevo como 5 ó 6 años por estos lares y esta es mi primera aportación oficial. Pero si todo va bien, no será la última.

  1. Que con lo tonto que está disqus últimamente, fijo que me lo marcaba como spam.
  2. Por supuesto, siempre hablando desde mi punto de vista. Cada uno tiene su opinión y los gustos son como los culos. Eso sí, no es por presumir, pero yo tengo un culazo ;)
  3. Oh My R’hllor.
  4. Teoría que defiende que no hay limoneros en Braavos y que, por tanto, la casa con la puerta roja de la infancia de Daenerys se encuentra en otro sitio.